ALMA DE DRAGON

37

Los Berkianos se encontraban almorzando armoniozamente en el salon de Hidromiel.
Kaira junto a los jinetes hablaban mientras comian tranquilamente.

Brutacio: ¿hoy que haremos? -

Hipo: practicaremos algunas maniobras, las ultimas no salieron muy bien -

Brutilda: ¿mas? Ya me estoy aburriendo de tantas maniobras -

Hipo: tenemos que perfeccionar - justifico

Kaira: y yo no voy a ayudar en eso -

Astrid: ¿por que no? -

Kaira: porque tengo que ayudar a Gothi - dijo simple

Brutacio: ¡¿ella no viene a practicar pero nosotros si? Que injusto -

Kaira: no es injusto, porque yo si se varias maniobras -

Pero el rugido de un dragon que venia desde afuera que hizo que todos los que estuvieran en la sala se callaran.

Relampago: ¡¡Kaira, es Rubi!! - escucho la castaña.

Kaira al escuchar eso salio corriendo del lugar, al salir, vio todos los dragones y berkianos rodeando algo.
Se atraveso entre todos hasta que llego a ver lo que pasaba.

Relampago trataba de despertar a una Rubi que tenia algunas plumas chamuscadas, un poco herida y cansada, se encontraba en el suelo.

Kaira: ¡Rubi! - corrio hacia ellos.

Hipo se hizo paso.

Hipo: ¿no es la dragona del nido? - pregunto dudoso.

Kaira: si - mirando a la dragona preocupada - y ella no habria venido aqui al menos que... - sus ojos se abrieron al entender la llegada de la dragona.

Relampago tambien lo entendio, incluso se habia tensado ademas de sentir miedo y preocupacion.

Hipo: ¿que ocurre? -

Kaira: casa... - murmuro antes de salir corriendo chocando con todos hacia el bosque.

Al entrar a su cabaña, se puso su armadura, se ato el cabello, su coloco su mascara, agarro sus espadas, arco y flechas.

Al salir Relampago ya la estaba esperando, se subio rapidamente sobre el antes de que el dragon alzara vuelo y volara rapidamente.

Ya se estaban alejando cuando una voz los detuvo.

Hipo: ¡Kaira esperanos! -

Kaira: ¡quedense en Berk y cuiden de Rubi! - quitandose la mascara rapidamente.

Hipo: iremos a ayudar en lo que sea - dijo mirandola firmemente.

Kaira a duras penas asintio.

Los dragones volaban lo mas rapido posible para llegar al nido.
Cuatro horas de viaje fueron cuando vieron mucho humo, la nube negra los cubria haciendo que vieran un poco borroso.
Al cruzarlo, los corazones de Kaira y Relampago se detuvieron.

Alrededor de la isla habia enormes barcos con jaulas.
Brigtorianos entraban al lado o bajaban de las naves.

Kaira: hay que entrar - dijo casi inaudible, pero Relampago la escucho perfectamente.

El dragon emplumado guio a los demas por una abertura que estaba escondida tras varias lianas.

Al entrar al nido, se escondieron en la malesa, Kaira se bajo de su hermano para asomarse detras de un arbol.

Varios dragones atacaban a los intrusos, pero estos contraatacaban con fuerza y agresuvidad, logrando someterlos.
Otros dragones trataban de salir del lugar con sus crias pero eran atrapados.

Kaira: ¿pero como supieron que estabamos aqui? - se preguntaba aun impactada.

Brutilda: ¿ese no es Sigur? - señalando un lugar.

Sigur se encontraba hablando con unos soldados.

Brutacio: ahora entiendo porque no estaba en Berk -

Kaira volteo a verlos sin entender.

Kaira: ¿de que estan hablando? -

Brutacio: lo encontramos ayer en una isla desierta, dijo que lo olvidaron hay, asi que nos ofrecimos en llevarlo a Berk, aunque primero pasamos por aqui y luego nos fuimos a Berk -

Kaira: ¿lo trajeron aqui? -

Brutilda: es lo que dijo -

Kaira: ¿pero que fue lo que ¡¡hicieron?!! - les grito a todos, menos a su hermano, enojada.

Hipo: Kaira no sabiamos que esto iba a pasar - trato de acercarse a ella, pero la oji morado se alejo.

Kaira: no te tuve que haberte traido - lo miro fijamente - trajiste la muerte a mi hogar -

Se escucho un potente rugido, voltearon a ver de que se trataba.

Bella lanzaba fuego a los Brigtorianos y con su cola los golpeaba furiosa.
Al mismo tiempo que forsejaba tratando de soltarse de la cuerdas por las cuales la sujetaban con fuerza.

Kaira: ¡mama! - saliendo de su escondite siendo seguida por su hermano y los demas.

Kaira saco un de sus espadas y empezo a pelear contra los soldados, estan caian en poco tiempo ante la fuerza, velocidad y agilidad de la castaña enmascara.

Relampago lanzaba hielo contra los enemigos, los golpeaba con su cola o los hacia arder hasta los huesos.

Los demas dragones y jinetes peleaban contra los soldados que se acercaban.

Kaira derribo a otro soldado de una patada en la cara, al escuchar un ruido a su lado miro hacia arriba, un roble que estaba en llamas se estaba callendo con rapidez, la oji morado salto esquivando e arbol que cayo en el suelo.

Ella iba a seguir peleando cuando sintio algo impactar en su cuello y se clavo. Le dolio mucho, se saco lo que fuera que tenia y vio que era un dardo.

¿?: es pequeño pero en algunos casos es letal - esa voz, esa maldita voz la reconocia en cualquier parte.

Volteo a ver con odio a aquella persona, Senif.

Kaira: Senif - dijo con odio.

Senif: hola Kaira, a pasado tiempo - dijo con una sonrisa tranquila.

Kaira: no el suficiente - agarrando firmemente su espada.

Senif: lamento que esta fuera la forma en la que nos volvemos haber, aunque no lo lamento tanto, este lugar merece arder, fue hogar de estos demonios -

Kaira: maldito bastardo - cuando se le iba a abalanzar, sintio un fuerte mareo al igual que un terrible dolor de cabeza.

Senif: ¿que ocurre Kaira? - haciendose el confundido.

Kaira: ¿que tenia ese dardo? - pregunto callendo de rodillas cuando estas no le respondian mas.

Senif: lo unico que puede detener a un Indre Drage - dijo mirandola con burla.

Kaira a pesar que se habia logrado volver a parar, volvio a caer de rodillas.

Senif: tengo que admitirlo, eres mas fuerte de lo que pense - acercandose.

Kaira apoyo sus manos en el suelo al sentir su cuerpo entumecido.

Kaira: maldito... - dijo ya perdiendo el conocimiento.

Senif se puso en cuclillas frente a ella.

Senif: duerme pequeña dragon -

Lo ultimo que vio la oji morado fue la sonrisa de Senif.
Despues de eso vio todo negro.