Bad Love ● Tom Kaulitz

9.

TOM.

Vacío. Me sentía fuera de mí, mis pies se sentían pesados pero aún así corrí al lado de Aly, la gente empezaba a mirar curiosos, lamentándose lo que acaba de pasar, algunos estaban llamando a una ambulancia. El cobarde que la arrolló se dio a la fuga, mal nacido.

Me inqué a su lado y la tomé en mis brazos.

— No Aly, no me hagas esto, quédate conmigo. — decía entre lágrimas mientras tomaba su rostro entre mis manos. Estaba tan lastimado, tenía raspones en toda su cara, sangre en su frente y aún había rastros de lágrimas en sus ojos. No quería ver su cuerpo pero estaba seguro que estaba peor.

La acuné en mis brazos dejando besos en su rostro. Me sentía tan culpable, nada de esto hubiera pasado si yo no hubiera hecho las cosas mal. Algunas personas se acercaban a decirme que no debía tocarla, que esperara a que llegara la ambulancia por ella pero yo no hacia caso. Me dolía sólo imaginar que ella pueda morir con el corazón roto. Me maldigo por eso.

Pronto llegó la policia y la ambulancia, tuvieron que tomarme entre dos policías para que pudieran tomar a Aly y llevarla al hospital. Me solté y corrí a su lado.

— ¡Déjenme ir, soy su novio, tengo que estar con ella!. — le grité a los paramedicos.

— Lo sentimos señor, pero no puede ir con nosotros. Le sugerimos llegar por su cuenta, es urgente llegar cuanto antes al hospital. — sin más cerraron las puertas y me dejaron ahí.

Rápidamente tomé un taxi rogando llegar a tiempo al hospital.

Una vez ahí desesperado pregunté por ella, me decían que ya había llegado y había entrado a cirugía. No podía hacer otra cosa más que esperar. Decidí que era hora de llamar a Bill.

— ¿Y ahora qué quieres Tom?. — respondió Bill molesto del otro lado.

— Te necesito, por favor. No puedo con esto solo. — me rompí, sollozaba al teléfono.

— ¿Qué sucedió Tom? ¿Dónde está Aly? ¿Estás con ella?.

— Aly... Aly sufrió un accidente Bill, y fue mi culpa.

— ¡¿QUÉ?! ¿Dónde está ella, dónde estás tú?.

—Estoy en el hospital del centro, ven rápido, te necesito. — y colgué, espero no tarde, en verdad me siento devastado.

Bill y los chicos llegaron a los 10 minutos. Les hice una seña de que se acercaran a donde yo estaba. Les conté cómo habían pasado las cosas, desde que salimos de la fiesta de Heidi hasta lo del accidente, ellos sólo se limitan a asentir y escuchar. Terminé y esperé a que ellos dijeran algo.

— Dime una cosa Tom, ¿por qué engañaste a Aly con Heidi?. — me sorprendí de la pregunta de Gustav, él siempre se había mantenido al margen de la situación. 

— Yo... la verdad no sé. — bajé la mirada, en verdad no sabía cómo responder a eso.

— Yo sí, por egoísta, por cobarde, ¿ACASO SABES CUÁNTO SUFRIÓ ALY POR TU CULPA? — explotó Bill. — NO. Sólo te importó lo que tú sentías, sólo querías satisfacer tus necesidades sin pensar si herias a la persona que siempre estuvo para ti.

— ¡Cállate! No sabes nada. — le respondí empujándolo. No iba dejar que me hablara así.

— Entonces explícame, dime, en verdad quiero saber porqué actuaste así.

— A ti no tengo porque darte explicaciones, la única que las merece es Aly. La amo y la dañé, y no sabes cuánto me arrepiento de eso.

— No digas tonterías Tom, no engañas a quien amas. — dijo Bill a mi oído mientras golpeaba mi hombro con el suyo y se iba de la sala.

Georg y Gustav se llevaron a Bill a tomar algo de aire fresco. Habíamos hecho una escena y tenia miedo de que nos sacaran del hospital. Me senté en el piso a pensar lo que acaba de pasar. ¿Realmente no amo a Aly?

Estuvimos esperando cerca de 5 horas alguna noticia, después de una eternidad salió un doctor preguntando por familiares de Aly James, rápidamente me puse de pie y me acerqué, también los chicos se acercaron, habían regresado ya más calmados.

— Buenas noches caballeros, soy el Dr. Smith, soy el que está a cargo de la joven Aly. Lamento mucho lo que le pasó, debo decir que llegó muy mal. — dijo con voz seria. — tiene 7 costillas rotas, su pierna izquierda al igual que su clavícula derecha están fracturadas en dos partes. Su cabeza fue la que más daño recibió. Tiene una fisura en el cráneo y posiblemente una conmoción cerebral, de la cuál no sabría decir si dejará alguna secuela. — explicó mientras miraba una tabla con el expediente de Aly.

— ¿Qué clase de secuelas? — pregunté con miedo.

— Bueno, varía de paciente a paciente pero generalmente van desde dolores de cabeza, cambios en la lucidez mental, pérdida de memoria y cambios en la forma de pensar, por sólo mencionar algunos, o puede que simplemente no le pase nada, repito, varía entre pacientes.

— ¿Cuándo cree que podamos verla?. — pregunto Georg.

— Por el momento no puede recibir a nadie, está en terapia intensiva, programé una revisión con ginecólogia para realizarle un legrado uterino, el producto lamentablemente no se logró. 

— ¿Producto? ¿De qué habla? — pregunté extrañado.

— Al parecer su pareja estaba embarazada, por el fuerte impacto sufrió un aborto, lo siento mucho. — me miró con lástima. Bill a mi lado soltó un jadeo — si me disculpan debo ir con más pacientes, cualquier duda pueden hacérmela llegar con alguna enfermera, quedo al pendiente. Con permiso.

Me había quedado en blanco, no lograba entender qué pasaba. Bill a mi lado estaba llorando.

— ¿Lo sabías Bill? — pregunté con miedo. Él asintió. — ¿Por qué no me dijiste nada?

— No me correspondía decirte nada, pero ahora debes saber la verdad. — hizo una pausa y continuó. — cuando Aly se enteró de su embarazo fue corriendo a decirte, ¿y qué crees que vio? A su novio siéndole infiel con su amiga. — dijo con amargura. — tenía poco más de un mes de embarazo, yo me enteré hace poco también, pero la veía tan feliz con la noticia, sabes que ella siempre quiso ser madre. — terminó de decir Bill con la voz entrecortada, estaba muy mal también.

Quiero morirme. Me dejé caer mientras lloraba enterrando mi cara en mis piernas, dejé salir todo, no podía con la culpa, la carga era demasiada.

— Lo siento tanto Tom. — dijo Bill a mi lado. Me abrazaba por los hombros. — soy tu hermano y me duele verte así, pero tienes que saber que no puedo hacer nada para ayudarte, tú causaste esto y debes solucionarlo tú solo.

...

Estábamos todos sentados en la sala de espera mientras nos dejaban entrar a ver a Aly, estaba revisando mi teléfono, el internet estaba lleno de noticias al respecto, videos y fotos de Aly siendo arrollada, de mi llorando con ella en brazos, de todo. Había recibido una que otra llamada de amigos preguntando por Aly y por mí, no tenía ánimos de responder, les decía que luego les llamaría.

Estaba respondiendo mensajes cuando de repente me llegó uno de un número desconocido.

"Siento mucho lo de Aly, lamento no haber visto tu cara de sufrimiento, eso y más te mereces, espera mi siguiente movimiento." 
- SH

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Y otro capitulo más, ojalá la estén disfrutando♡
L@s leo.

— myg.