Ojos claros. Cabello despeinado. Abdomen marcado. Perfume caro. Palabras en francés susurradas en mi oído. Esas eran las cosas que no me podía despegar de mi mente últimamente. Era lo que más ansiaba sentir... pero por dos.
HISTORIA DENTRO DE UN MU...
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— TÚ, YO & ÉL —
Las manos de Pierre sobre mis mejillas, sus labios acariciando los míos y su lengua abriendo camino en mi boca, todo me toma por sorpresa... porque esta sucediendo. De alguna manera abro mis ojos y observo a Pierre, quien tiene los suyos cerrados, pero intento moverme ligeramente sin separarme de él para ver que esta haciendo Charles.
Él sigue acostado en la cama observándonos pero veo como una sonrisa se forma en su rostro lentamente y me excita verlo mientras me beso con Pierre... sé que ahora sonríe pero no lo hará por mucho tiempo, porque es muy celoso y odia compartir. Así que, intento provocarlo un poco y pongo mis brazos alrededor del cuello de Pierre para acercarme más a él, mientras Charles me mira arqueando una ceja.
Es divertido ver a Charles observándome, pero vuelvo a la realidad de que estoy besándome con Pierre cuando siento sus manos apretando mi trasero y me toma por sorpresa, por lo que, no puedo evitar separarme de él.
— ¡Oye! — exclama Charles llamando nuestra atención y ambos volteamos a verlo — Ojo con esas manos — le advierte el monegasco y Pierre suelta una risa
— Si recuerdas como es un whisky doble ¿No? — pregunta burlándose de él
—Si, lo recuerdo bien — responde Charles un poco molesto — Y también recuerdo que estas tocando a mi novia ¿De eso te acuerdas tu? — señala y Pierre voltea a verme, puedo ver en su expresión como quiere molestar a Charles pero también como esta ansioso por la situación, pero Pierre se acerca a mi oído
— Tu solo sigue mirándolo... y en unos minutos va a empezar a masturbarse viéndonos, te lo aseguro — susurra Pierre en mi oído y me separo ligeramente de él para verlo sonreír y guiñarme un ojo.
Ellos tenían un código, whisky doble; acordaban quien tendría el control durante toda la noche e incluso, Pierre había dicho que no era la primera vez que Charles observaría al francés teniendo sexo... ellos sabían exactamente que hacer y como actuar en estas situaciones, aunque era evidente que esta vez era un poco más difícil para Charles. Aún así, quiero que sea una buena experiencia para los tres.
— Desvísteme — le digo a Pierre intentando sonar segura de mi misma, aunque a cada mirada que le dedico a ambos pilotos... me siento más segura de mi, porque los dos me observan con atención y una pisca de lujuria en sus ojos se reflejan.
Pero Pierre no pierde el tiempo en tomar los bordes de mi blusa y levantarla para quitármela, dejándome solo en mi bonito brasier de encaje que lo sorprende por el contraste a mi holgada y claramente ropa de viaje que llevo puesta. Con el tiempo había tomado la costumbre de ponerme ropa interior de encaje cuando Charles menos lo esperaba. Porque a veces teníamos sexo en lugares que no esperábamos hacerlo en realidad... como en el jet. Había ocurrido pocas veces, pero era divertido verlo sorprendido al encontrarse con mi ropa interior.
