𝐂𝐀𝐓𝐎𝐑𝐂𝐄 𝐃𝐈𝐀𝐒 ⋯ 𝐡𝐚𝐨𝐛𝐢𝐧

𝐝𝐢𝐚 𝐜𝐚𝐭𝐨𝐫𝐜𝐞

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[14/02/2016]

Zhanghao, no lo sabes, pero cada noche al observar las estrellas pienso en ti y en tus ojos brillantes. En estos días me di cuenta que dependo de ti como planta a la tierra.

Créeme que a primera vista me enamoraste. Tu sonrisa, tu actitud, tu bello rostro. Es por ti que me aferré a este sentimiento que no puedo explicar. No hace falta decir que quisiera estar contigo, quiero gritarlo al mundo.

Y creo que es el momento.

¿Quieres saber quien soy? Te espero en la cafetería a la hora del almuerzo. Tendrás una sorpresa.

Antes de acabar esta carta, déjame agradecerte por permitirme demostrar mi aprecio y cariño hacia ti mediante estos papeles con palabras honestas. Gracias por no ignorar mis sentimientos.

Te quiero mucho Hao hyung, feliz San Valentín.

Eso fue todo conmigo: tu querido desconocido.

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No supe porqué, pero tenía un sentimiento de tristeza al saber que ya no recibiría más cartas en los días siguientes. De alguna manera me había acostumbrado, esperando con ansias cada tiempo libre para acercarme a mi casillero y leerlas.

Cerré esta última carta en mis manos y las guardé junto a las otras cuando comencé a pensar en la persona que estaría esperando por mí. ¿Sería alguien que conozco bien o un compañero de alguna clase?

Al girar para caminar hacia la cafetería, el cuerpo de Hanbin me encontraba detrás mío mientras me sonreía. Ya no me había asustado, me acostumbré a que siempre aparezca de esta forma.

─ ¿A dónde vas?

─ Iré a conocer al desconocido de las cartas. ─dije con nervios. Aún no creía que habían pasado catorce días desde que todo empezó.

─ Te acompaño. ─dijo tomando mis manos.─ Vamos.

Andamos con lentitud hasta el lugar fijado, hasta que me detuve unos pasos antes de ingresar. Sentía que sería una gran sorpresa y aún no estaba listo.

─ Hyung...calma. Solo respira. ─al parecer mi nerviosismo era muy notorio, pues Hanbin me dio un abrazo para tranquilizarme.

─ De alguna manera, el desconocido de las cartas se volvió especial para mí en tan poco tiempo. ¿Y si no le agrado del todo cuando me vea?

─ Hao hyung, si ese chico decidió enviarte esos papeles es porque le gustas tal cual como eres. Estoy seguro que brincará de emoción cuando te vea entrar por esa puerta.

─ Tienes razón. No me preocuparé mucho. ─solté y abrí la puerta de la cafetería encontrando solo una mesa con una rosa, una tarta de fresa y la melodía de Love Is Everything de fondo.

Miré a mi alrededor en busca de alguna persona, pero no se encontraba absolutamente nadie más que Hanbin y yo.

─ Umm...creo que no está aquí.

─ No, Hao hyung...─susurró y me tomó ambas manos mirándome a los ojos.─ Aquí estoy.

En ese momento, mi mente comenzó a proyectar todas las cartas de todos estos dias y conectó las pistas. Fue ahí cuando supe que indicaban a una única persona: Sung Hanbin.

No pude ocultar mi sonrisa y sonrojo al descubrir que todo se trataba de aquel chico que conocí al iniciar el curso. De alguna forma mi corazón empezó a latir con fuerza al pensar en todo lo que hizo para que yo me diera cuenta, pero simplemente fui tan ciego y tonto para no notarlo.

─ Te di tantas pistas e intenté hacer que lo descubrieras, pero solo te quedabas pensando. ─decía entre risas que se volvieron contagiosas.

En ese momento solo podía pensar en todo. ¿En serio le gustaba? ¿Todo lo que dijo sobre mí era real? Aún no podía creer que alguien se expresara tan lindo de mí.

─ Hanbin...¿por qué yo?

─ Desde que te conocí, toda mi atención fue directamente hacia ti. Me gustaste desde el comienzo de curso, pero no sabía como decírtelo. Tenía vergüenza.

─ Agradezco todas tus cartas y palabras lindas. Nunca me había sentido de tal forma con un pedazo de papel. ─dije y bajé mi rostro porque sabía que me estaba sonrojando.

─ Hao hyung...no te pido que sientas lo mismo que yo ahora, pero si desearía que no seas indiferente ante mis sentimientos. Sigue tratándome como un amigo más, yo esperaré por ti.

No dije otra cosa y me lancé sobre él, atrapándolo en un abrazo. Se sentía tan lindo e irreal, como si no hubiera sucedido todo en tan solo catorce días.