Moralmente correcto

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—Wei Wuxian, toma asiento —pronunció sin alzar la vista de su meticuloso escritorio. Lan Qiren se encontraba inmerso en la revisión de informes sobre los discípulos de la secta Lan y no tenía tiempo para distracciones; la llegada de los nuevos discípulos le había inundado de trabajo.

Wei Ying se inclinó con respeto y saludó al maestro con una sonrisa forzada antes de sentarse en el suelo frente a él, con cierta dificultad. Consciente de que enfrentaba problemas, Wei Ying no deseaba revelar debilidad ante un Lan nuevamente.

—Wei Wuxian, toma asiento —pronunció sin alzar la vista de su meticuloso escritorio. Lan Qiren se encontraba inmerso en la revisión de informes sobre los discípulos de la secta Lan y no tenía tiempo para distracciones; la llegada de los nuevos discípulos le había inundado de trabajo.

—Te encuentras en falta por no asistir a la clase de hoy —reprochó Lan Qiren con severidad—. ¿Eres tan perezoso? Sabes que la pérdida de tiempo está prohibida durante los recesos de la nube. No pongas como excusa que estabas herido. Sé que Xichen te sugirió que fueras al manantial a meditar. Deberías estar recuperado ahora.

Lan Qiren se encontraba disgustado hasta la médula por la actitud de la persona frente a él. Incluso habían sido lo suficientemente amables como para permitirle ingresar a un lugar exclusivo para la secta Lan.

Los manantiales de Gusu, no era terreno para los forasteros.

Ante la falta de respuesta del joven discípulo, Lan Qiren levantó su vista, irritado y furioso. Las palabras que estaban a punto de salir de su boca se desvanecieron al ver la tez de la persona frente a él. Parecía que algo no iba bien. Su rostro estaba pálido, sus labios descoloridos y secos, sus ojos rojos e hinchados. Tenía vendajes que estaban ya manchados de sangre en sus brazos y piernas.

—¿Qué ha sucedido? ¿No fuiste al manantial a sanar tus heridas? ¿Eres tan negligente con tu propio cuerpo? ¿O acaso eres demasiado orgulloso?— preguntó Lan Qiren con enojo oculto.

Las manos de Wei Ying se apretaron nerviosamente en su túnica. No quería hablar de lo que había pasado en el manantial. No quería recordar la mirada fría y despectiva de Lan Wangji, ni las palabras hirientes, ni el dolor que le había causado

—Si fui maestro Qiren— respondió con voz tensa Wei Ying.

—¿Lo hiciste? ¿Por qué parece lo contrario?— insistió Lan Qiren, sin creerle —¿Acaso te metiste en otro problema? ¿Qué hiciste esta vez?

¿Por qué hace tantas preguntas? Solo vine por el castigo ¿No es así?

Wei Ying se sentía incómodo ante el interrogatorio. Solo había venido a recibir su castigo, ¿no era así? Quería salir de allí lo más pronto posible, quería estar solo.

—El segundo Jade estaba en el lugar— soltó Wei Ying con un tono de enojo y rencor.

Wei Ying se sentía incómodo ante el interrogatorio. Solo había venido a recibir su castigo, ¿no era así? Quería salir de allí lo más pronto posible, quería estar solo y llorar hasta quedarse dormido.

El Qi del viejo Qiren se revolvía tormentosamente. No podía permitir que su sobrino se involucrara con alguien como Wei Wuxian, hijo de la discípula problemática y rebelde que no respetaba las reglas del clan Lan. Aunque había tratado a Wei Ying anteriormente y no parecía mala persona. Aun no podía bajar la guardia, recordando cual es la sangre que corre por sus venas

—¿Qué sucedió ahí? ¿Le hiciste algo a mi recto y honorable sobrino?— inquirió Lan Qiren con voz severa y acusatoria.

Wei Ying, con amargura, pensó: ¿Recto? ¿Honorable? ¿De qué habla este anciano? Lan Wangji no era nada de eso; era cruel y desalmado.

Como enamorar a ese omega🤍 ~csDonde viven las historias. Descúbrelo ahora