Aquí viene de nuevo, es la felicidad.
Sé qué se trata de ella y de nadie más
Porque mi astillado rostro quiere brillar
Cuando pasa sobre el viento, movimiento fugaz.
Ay pero que dicha siento
Cuando con amor de pensante
Trae por arma un pañuelo lento
Y quita con rabia de mí el mugre maleante.
Opto morirme en aquella situación
Porque sus delicados dedos me brindan ternura
Aun siendo un muñeco me envuelve en pasión
Y el espíritu que no tengo presencia su hermosura.
Pero el tiempo se vuelca a un tormentoso invierno
Porque la mayor parte del tiempo dialoga con otra gente
Ay... si tan solo pudiera quebrantar ese vidrio
Podría declararle frente al mundo lo que este muñeco siente.
Pero la cosa no es sencilla cuando vas inanimado
Solo puedo contemplar su brillo y luz
Desde este estante viejo y destartalado
Sin poder hacer mi manifiesto, estando en una cruz.
Sé que los días pasarán y ella seguirá ciega
Por mi parte la impotencia solo me dejara contemplar
La maravilla de sus pasos y el encanto de melena
Y seguiré satisfecho porque su virtud me suele embriagar.

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Quince poemas de amor
PuisiQuince poemas de amor es una compilación de textos escritos a partir de las experiencias amorosas del joven escritor. Escritas y hechas publicas con la intención de que los lectores se identifiquen y puedan tomar parte del texto en su vida y en las...