[2] Memory ᶜᵃʳʳᵉʳᵃ ˣ ˢᵖʳᵉᵉⁿ

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Frente Ivan se encontraba frente una puerta, su alrededor estaba oscuro debido a la noche. Tomo valentía y la abrió. Ahí yacía el cuerpo de Rodrigo, estaba sentado mirando a la ventana.

-Hola.

-Volviste Ivi.

Habló aun mirando la ventana. Ivan se sorprendió ante el apodo, él no recuerda haberle dicho que ese era el apodo que le había apuesto.

-¿Qué?

-¿No te acordas? Ivi, el apodo que te puse.

-Si me acuerdo, pero ¿Quién te lo dijo?

-¿Quién dijo qué?

Rodrigo río levemente, Ivan intento de acercase. Al llegar a su lado pudo ver su rostro, había una sonrisa pero no demostraba felicidad. Su sonrisa mostraba ironía y malicia.

-¿Rodrigo?

Susurró con un poco de miedo dando un paso par atrás.

-Ya deberías darte por vencido, no te voy a recordar no eras tan importante Ivan.

Los ojos de Rodrigo estaban mirándolos, parecía molesto.

-Por más que vengas aquí mil veces, no te voy a recordar porque no te amo Ivan.

La mente de Ivan estaba totalmente bloqueada, no entendia el porque de la actitud de Rodrigo.

-Va a...ser mejor que me vaya.

-Huí como siempre Ivan

La respiración de Ivan se aceleró un poco debido al nerviosismo de no entender la situación, las ganas de llorar aparecieron aún que el no quisiera.

Un golpe en su hombro derecho hizo que Ivan abriera sus ojos, pestaño varias veces hasta adaptarse a la luz del lugar. El golpe provenía de su derecha, era Nico.

En ese momento habia entendido todo, habia tenido otra pesadilla. Tal y como lo prometió, al día siguiente fue a verlo. Se encontraba en el pasillo esperando que Rodrigo volviera de un estudio y sin darse cuenta había caído en un sueño.

-¿Estás bien?

-Si, ¿Hice algo raro?

-Solamente caras de disgusto.

Ivan se acomodó mejor en la silla y paso sus manos por su rostro estaba frustrado.

-¿Volvió?

-Todavía no y quería aprovechar para hablarte de algo.

-¿Sobre...?

-Rodrigo y su condición.

Ivan asintió dándole a entender que lo escuchaba.

-Como sabes Rodrigo me recuerda, pero no de la manera que vos pensas.

-No te entiendo.

-Rodrigo solo tiene el recuerdo del sentimiento que soy su mejor amigo, pero no recuerda ningún momento de  nosotros juntos.

-¿Entonces?

-Yo también soy un desconocido ante sus ojos.

-Bienvenido al club.

Dijo con sarcasmo haciendo que lo dos rían levemente.

-¿Cuándo te enteraste?

-Ayer me lo dijo.

-No me siento tan solo.

-¿Te contó que lo sabe?

-Y que no quiere nada conmigo.

Completó Ivan y Nico soltó un suspiró.

-Dolió más escucharlo decir eso, pero al fin de la cuentas ya lo sabía.

Añadió alzando los hombros.

-¿Y como estuviste estos últimos días?

-Como se puede, hay varias cosas que todavía no aceptó.

-Todo fue demasiado rápido.

-¡Chicos!

Una voz a su derecha lo llamó, al ver se dieron cuenta que era la madre de Rodrigo.

-¿Paso algo?

Nico fue el primero en hablar, la mujer negó con la cabeza.

-Rodrigo se va a poder ir hoy mismo. Asi si quieren pueden verlo mañana en casa, hoy está muy cansado porque ayer no pudo dormir muy bien.

-Claro.

Habló Ivan, su amigo estuvo de acuerdo con ella y tras saludarse se fue.

-¿Vas a tu casa?

Preguntó Nico mientras que ambos caminaban hacia el ascensor.

-Si pero primero voy a hacer una cosa.

-¿Vas a ver a Zac?

-Tengo que entregarle algo que me pidió.

-¿Qué onda con él?

Preguntó al estar solos dentro del ascensor.

-Nada, somos amigo y me esta ayudando a pasar esto.

-Se que no estuve tan presente últimamente y que no hablamos mucho, pero quiero que sepas que cualquier cosa me podes decir. Somos mejor amigos desde que tenemos uso de razón.

Nico lo miro e Ivan asintió.

-Gracias y si necesitas hablar de algo podes decirme, lamentablemente estamos en la misma sintonia.

Luego de unos segundo donde compartieron unas palabras, Ivan bajo en el piso que había indicado. En la recepción pregunto por Zac y le indicaron el consultorio. Al llegar toco la puerta escuchando un "Adelante".

Al abrir la puerta lo encontró sentado detrás del escritorio mirando su celular.

-No sabía que el trabajo de un doctor era tan fácil.

Zac lo miro y río levemente. Ivan estaba apoyado en la puerta cerrada con los brazos cruzados.

-¿Como estas? ¿Pudiste dormir?

-Bien y si pude dormir.

Mintió, toda su noche fue un desveló.

-Voy a hacer que te creo.

-Te traje lo que me pediste.

Metió su mano en el bolsillo de su campera y sacó un pendive. Zac lo aceptó con gusto.

-Gracias.

-No es nada, es una forma de agradecerte por lo que haces.

-No tenes porque.

Zac guardo el pendrive y tecleo algo para ver en la pantalla del monitor.

-¿Puede ser que a Rodrigo le dieron el alta?

-Si, hoy a la tarde.

Zac asintió con la cabeza
-¿Vas a querer que te lleve?

-Tranquilo, no voy a esperar cuatro horas para que termines tu turno.

Menciono en forma de broma y los dos se rieron.

-Cualquier cosa decime, cuídate.

-Igualmente.

Ivan salió del consultorio y se dirigió a la escalera de emergencia para bajar más rápido.  Una vez que estuvo fuera del hospital soltó un suspiro y se dirigió a su casa sumergiéndose en sus pensamientos.