Capítulo 2: El Diablo está en la Ciudad

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Sentada en el puesto estaba la mujer conocida como Lady bullseye. Ella miraba en uno de los papales que imprimió todo los datos de su siguiente objetivo, se trataba de un joven de 15 años de pelo verde con pecas, que vivía en mustafu. No aportaba mucho mas pero no era que le importara, era un objetivo y ya. Su viaje pudo ser mas cómodo si no fuera por...

Señora mayor: ...Y le regalare a mi nieto bla bla bla...- Seguía hablándole esa vieja que por algunas razón pensó que la persona a su lado le interesaba la historia de su vida.

La mujer no aguantaría mas este calvario. Toma un envoltorio de maní, ella lo abre. Prepara ese cascaron del maní y dispara dicha nuez. Golpea el asiento frente a ella y se dirige directo a la boca abierta de la mujer. Al entrar, ella empezo a ahogarse, sintiendo como el aire no le entraba mientras que la mujer a su lado no le prestaba la menor importancia. Finalmente la anciana dejo de forcejear y queda completamente inerte...

Lady Bullseye: Izuku Midoriya...- leyó por ultima vez para memorizarse el nombre de su objetivo.

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El chico de cabellera verde dormía lo mas cómodo de su cama, pero eso no dura mucho hasta terminar de abrir los ojos. Al terminar de despertarse, se pone de pie y hace algunos estiramientos. Sin embargo no tarda en percatarse que... Aun estaba usando su traje de spiderman.

El corre rápidamente al baño y se mira al espejo. Ve en sus rostro que tenia moretones bastante notorios, ya que estaban hinchados y de color morado, todo por cortesía de ese hombre de arena que se topo. El gimió de frustración, bueno no había nada mas que pudiera hacer.

El se cambio ese disfraz y se puso ropa normal, lo llamativo era una chaqueta de color negra con rayas rojas. No iría a patrullar por un tiempo, ahora tenia que enfocarse en tomar buenas fotos para que el daily bugle lo contrate. Bajo las escaleras y se dirigió la cocina, entrando en sus fosas nasaceles un aroma delicioso. Al entrar en la cocina, encontró a su madre preparando el desayuno.

Inko: Buenos días I...¡¡AHH!!.- La mujer grito horrorizada al ver a su hijo con todos los moretones. Y corre para examinar con cuidado a su hijo.- ¿¡Que te paso?!.

Midoriya: Yo... me atropello un auto.- Fue lo primero que se le ocurrió decir.

Inko: ¿¡Que?!.- Exclamo horrorizada.

Midoriya: ¡Mientras repartía los curriculums un auto me atropello!¡El tipo estaba super arrepentido, y ofreció pagarme el hospital!¡Pero no recibí mucho daño!.- Invento rápidamente. No había pensado mucho en el que le diría a su madre.

La mujer se le quedo mirando a su hijo, un tanto insegura por la explicación que le dio. Eso no sonaba algo lógico pero su hijo no era caracterizado por mentirle. Ella suspiro soltándolo, después sonrió.

 Inko: Esta bien, entonces es hora de desayunar.- Afirmo mostrando le los platos y sentándose en la mesa.

El chico sintió un gran alivio al ver que su mama le creo, pero le dolía tener que mentirle a su madre aunque después de hoy seguramente ya no tendría que hacerlo. Se sienta en la mesa, toma sus palillo y se dispone a degustar su desayuno, siendo este un Asa Teishoku. 

Pasaron unos momentos y la mujer se percato de que su hijo no estaba comiendo demasiado. Ella decidió encarar eso.

Inko: ¿falta condimento o le puse mucho?.- Pregunto para tratar de llamar su atención pero no lo logro.- ¿Que pregunta debo hacer para que me digas que te pasa?.

Izuku: Lo siento mama. Es solo que estoy estresado ya que no he recibido llamadas después de entregar Solicitudes.- Admitió un tanto frustrado.

Inko: Ya conseguirás algo, eres un joven brillante. Alguna academia te llamara.- Aseguro con una sonrisa.- Ah eso me recuerda algo.

Spiderman(Bnha)[En Pausa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora