La tercera vez que Hermione cuidó de James, ella estaba en un rincón de la casa charlando con Harry sobre los planes para derrotar al Voldemort de esta epoca. Ron parecía estar dormido sobre el sofá, en tanto Ginny con Luna estaban ocupados cumpliendo con su parte de la misión. Nadie salvo el Trio de Oro sabía adonde habían ido y ellos se negaban a contarlo, para disgusto de todos los demás.
De todos modos, James parecía estar algo triste. Harry y Hermionen hablaban sobre eso.
James, por su parte, observó como Hermione y Harry hablaban, demasiado cerca el uno del otro y manteniendo demasiado contacto fisico, intercambiando demasiados secretos. Luciendo demasiado bien juntos, él estaba un poco desanimado.
Hermione era su novia, pero apenas pasaban tiempo juntos desde que ella llegó. Todo el tiempo ella estaba con Harry o Ron susurrando en secreto, o con Ginny, o Harry, o Luna... O Harry otra vez.
De alguna manera, Harry y Hermione pasaban demasiado tiempo juntos. Un tiempo ridiculamente largo.
Él hombre obvservó a su novia y a la versión adulta de su hijo, su ceño se frunció mientras los observaba fijamente. Estaba tratando de no sentir celos, pero le era dificil.
Los Potter siempre habían sido buenos enamorandose, cuando un Potter amaba lo hacía de verdad; amaban intensamente. James como todo buen Potter era intenso, pero así como era de intenso tambien era posesivo. Le gustara o no, la sangre Black todavía corría por sus venas. Y era bien sabido por todos que los Black eran posesivos con aquello que consideraban suyo, ya sea un objeto o una persona, especialmente si esta persona en cuestión era su pareja.
Para la mala suerte de James, Remus no estaba allí para poder escuchar con su oído desarrollado lo que hablaban Harry y Hermione, y Sirius estaba demasiado ocupado jugando con Harry bebé como para ser de ayuda. James necesitaba un plan.
Por otra parte, Hermione y Harry se conocían desde hace más tiempo y habían pasado por muchas cosas juntos. Sabían todo del otro, Harry incluso sabía las cosas más insignificantes y pequeñas sobre Hermione; James apenas sabía algunas cosas que había notado cada vez que la vio, cosas simples y nada más que trivialidades, ¿cómo podría competir él con Harry?
Simplemente no podía, era demasiado difícil superarlo.
—¡No podemos hacer eso, Harry! —Hermione chilló de pronto, luciendo horrizada y atrayendo la atención de Lily, Padfoot, además de la de James (que fingió que no los estaba mirando).
—¡Es lo que resultaría mejor!
—¡¿Matarías a un bebé?!
Harry pareció confundido por unos segundos, luego lo comprendió y decidió actuar conforme parecía haberlo planeado Hermione.
James se tensó ante la pregunta de Hermione y pudo ver a Padfoot parandose protectoramente junto a bebé Harry.
—¡Lo haría! ¡Si se trata de ese tipo lo haría! —Harry fingió enojo.
Hermione resopló, luciendo frustrada. —Solo lo dices porque lo odias. —espetó. —Pero no podrías hacerlo en verdad.
—Hermione tiene razón, Harry. —la voz de Ron se escuchó. —No podrías hacerlo. Tal vez Hermione si, pero no tu.
—¡Yo no haría algo como eso!
Hermione parecía ofendida.
Ron, que había escuchado el plan de Hermione y Harry, decidió actuar también para ayudar. Eso era mejor y más divertido que fingir que dormía.
—Encerraste a una mujer en un frasco durante todo un verano, Hermione. —Ron le recordó con diversión.
—No fue durante todo el verano, fueron solo dos semanas. —Hermione respondió remilgadamente.
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10 veces en las que Hermione cuidó de James y 1 en la que no lo hizo.
Hayran Kurgu|Diez veces en las que Hermione cuidó de James y una en la que no lo hizo. Los resultados fueron sorprendentes.| •Segunda parte de «Diez veces en la que James vio a....», ¡esta vez desde la perspectiva de Hermione y lo que sucedió después de su últ...