(Este capítulo contiene Lemon)
Ya era de madrugada y aún seguíamos sin dormirnos, así que pensé que charlar sería una mejor opción que estar usando los teléfonos. Quería aprovechar el tiempo que pasaba con ella.
- T/n. - Llamé su atención en un tono de voz bajo.
- Dime. - Apagó su teléfono y giró su cabeza para mirarme.
- Hablemos, no quiero dormir, pero tampoco quiero estar con el móvil. Tenemos que aprovechar para una vez que me quedo. - Rió.
- Está bien, ¿de qué quieres hablar? - Me miraba interesada.
- No sé... quiero que me cuentes cosas sobre ti que no sepa.
- Ahora que lo dices... soy yo quien no sabe casi cosas de ti. Bueno, sé que vives con tus padres, te gusta el vóley, y que estudiar no es lo tuyo. Pero hay cosas que no te he preguntado nunca, como... ¿tienes hermanos?
- ¿No lo sabías? Juraría que ya te había contado que tengo una hermana. - Me comencé a dar cuenta de que era cierto que yo no solía abrirme a contar cosas acerca de mí.
- Pues no, no lo sabía.
- Vale, bien pues me toca. ¿Hermanos?
- Un hermano dos años mayor. - Me sorprendió no saber ese dato sobre ella.
- ¿De tercero en el Fukurodani? - Asintió. - Pues tienes razón, no nos conocemos en absoluto. - Una vez dejé mi tono irónico me fijé en cómo parecía cuestionarse algo. - ¿Pasa algo?
- No, es que... - La miraba con intriga. - No sé casi nada sobre ti, y aún así me gustas... ¿por qué? - Como si sus palabras fuesen un golpe en el estómago, comencé a sentir un cosquilleo extraño en la barriga, ¿a eso le llamaban amor?
- Ya que lo dices, eso nos pasa a ambos. - Dije en un intento de disimular cómo me sentía realmente. Ella me miró con una suave sonrisa formada en su rostro. - Espero que cuando descubras mi secreto no me dejes. - Bromeé.
- Nunca se sabe, dejaré al tiempo actuar sobre nuestra relación. - Se levantó ligeramente para unir nuestros labios en un rápido y corto beso. - Por ahora va funcionando... - Seguía con su cara a escasos centímetros de la mía.
Sin pensarlo le volví a besar, esta vez fue un poco más duradero, y al separarnos tuvimos el tiempo justo para coger aire y prepararnos para un tercer beso, este más profundo y pasional, durante el cual se fue acomodando para terminar sentada encima de mí, sobre mi abdomen, provocando un cosquilleo por todo mi cuerpo.
Finalmente nos volvimos a separar, manteniendo contacto visual.
- Tus ojos... - Dije sin pensarlo. - No me había fijado tan bien nunca, pero son preciosos. - Me alegró provocarle una risa tonta mientras se refugiaba en mi cuello para ocultar su cara, posiblemente porque se habría puesto roja.
Aproveché la posición para poder besar su cuello, a lo que ella reaccionó aferrándose a las sábanas de la cama con una mano, y con la otra a mi brazo.
- Esto es... raro.
- ¿Nunca antes te habían hecho algo así? - Se levantó finalmente obligándome a separar mis labios de ella, dejándome ver la rojez en la zona que acababa de besar.
- Me da que vas a ser el primero para mí en todo lo que conlleve una relación... - Sonreí ante la idea. Lo que no esperaba es que lo dijera con dobles intenciones, las cuales capté cuando apoyó su mano cerca de mi entrepierna.
Le miré con algo de deseo mientras poco a poco ella movía su mano más y más cerca, alterando mis sentidos y provocando que mi parte baja endureciera.
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Prodigios [Kageyama x tn]
FanfictionDe Tokio a Miyagi, un cambio drástico que t/n hace a voluntad para poder seguir jugando a vóley en la preparatoria, pero su fuerza y resistencia física le permiten jugar en los equipos masculinos a los que tanta afinidad tiene. En su nueva ciudad c...