CHAPTER THREE.
Cuando Youngsoo tuvo su hoja de consentimiento enfrente, estuvo seguro de que sus padres debían firmarla.
Había observado los exámenes de las dos japonesas justo como lo hacía con los métodos de estudio de Younghoon, Akira iba bastante por delante y Reiko tan solo había quedado cuarta por dos preguntas. Tenía que hacer algo para volver al segundo puesto y después superar a Younghoon, pero esas dos solo le estaban complicando las cosas.
¿Tal vez podría usar todo lo que estaba pasando a su favor?
—¿Sus padres van a firmar la hoja? —preguntó Youngsoo hacia las dos chicas que tenía al lado.
—Ellos no están aquí —responde Reiko.
Bueno, tenía razón.
—¿Pero darán consentimiento?
Las dos estaban completamente seguras de que querían esos puntos, les vendrían bastante bien para conseguir entrar en una buena universidad en Seúl. No podría ser tan malo si solo entrenarían para ser reservas, ¿no?
—Probablemente sí.
Eso no le gustó. No, no y no. Ellas no debían tener esos puntos extras del CSAT, no pensaba lidiar con quedar por debajo otra vez. Menos en tan importante examen.
—Pero estarían entrenando para otra nación.—argumentó —. ¿No sería... algo así como una traición? Creo que no sería conveniente entrar siendo de otro país.
Lo pensaron durante unos segundos, ¿que lo llevaba a pensar que un simple entrenamiento era una traición? Akira observó a Reiko con extrañeza y cuando esta le regresó la mirada supo que ambas estaban pensando lo mismo. Youngsoo no quería que firmaran esa hoja porque significaba que tendrían puntos extras. No lo entendían, en el CSAT no sabían siquiera si les tocaría presentarlo juntos, ¿por qué le preocupaba tanto?
—No usaremos el entrenamiento para atacar Japón —niega la pelinegra —. Eso sí sería traición.
—Pero...
—Es nuestro problema si aceptamos o no, no es de tu incumbencia —le respondió la rubia ya bastante cansada de sus contras y volvió su vista al examen, necesitaba saber exactamente dónde se había equivocado.
Reiko aún seguía con su atención en Youngsoo y se pudo dar cuenta de la manera en la que veía a su amiga. Una ventaja de estar la mayoría del tiempo en silencio es que se podía dar cuenta de muchas cosas que otros no, como por ejemplo que Chiyeol y Deokjoong eran las personas en las que más se podía confiar, que a la presidenta de la clase a veces le ganaba el miedo y se le dificultaba controlar a todos pero afortunadamente sabía sobrellevarlo y ahora estaba tan segura de que Youngsoo tal vez no sea la buena persona que todos estaban acostumbrados de ver.
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𝗙𝗢𝗥𝗘𝗜𝗚𝗡 | 𝘋𝘶𝘵𝘺 𝘈𝘧𝘵𝘦𝘳 𝘚𝘤𝘩𝘰𝘰𝘭 [Kwon Ilha]
FanficHISTORIA CANCELADA. Ser extranjera tenía tantas ventajas como desventajas, y eso Akira lo sabía muy bien. Diferente cultura, gente con otras ideologías, distinta comida... Unas esferas gigantes en el cielo que al caer pueden matarte... -¿Alguien s...