005﹒tug of war

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George, otro día más, se despertó sobresaltado por las alarmas que les indicaban que era hora de despertarse. El chico estaba emocionado y tenía miedo a partes iguales sobre cuál sería el siguiente juego.

-Venga, vamos, Wilbur -intentó despertar a su compañero, el cual protestó.

-Siempre nos hacen levantarnos temprano -se quejó, frotándose los ojos mientras Tommy se les acercaba con cara de no haber dormido nada.

George se acercó a Quackity, quien dormía solo en su litera, para hacerle un gesto para que fuese con ellos. El chico aceptó y los cinco bajaron las escaleras.

Un guardia con la máscara puesta se colocó delante de las puertas.

-Una vez más, felicidades por llegar al tercer día, jugadores -felicitó el guardia -. En el día de hoy se llevará a cabo el tercer juego, al que deben dirigirse ahora. Buena suerte.

Dicho eso, otros dos guardias comenzaron a abrir las puertas y los jugadores, cada vez menos, comenzaron a empujarse para pasar.

-Vamos -animó Tommy -. Ya solo nos quedan tres días sin contar este.

El grupo de cinco avanzó hacia la puerta y recorrió los pasillos hasta llegar a un pasillo de suelo metálico. El corazón de George se detuvo cuando vio una gran plataforma alta separada a la mitad de la cual colgaba una cuerda.

En cuanto lo vio supo de qué iría el juego y no le gustó en lo absoluto.

-Bienvenidos al tercer juego, jugadores -saludó la voz robótica -. En este juego se os separará en cuatro grupos distintos, entre los cuales solo habrá dos de ellos ganadores.

George miró a Wilbur horrorizado. Iban a eliminar literalmente a la mitad de los jugadores, y eso significaba que era tan probable morir como tirar una moneda al aire y que salga cruz.

-El equipo 1 estará formado por: jugador 03, jugador 07, jugador 12... -el robot comenzó a decir números de jugadores más o menos en orden, y para el alivio de los chicos, ninguno de los números dichos fue alguno de ellos.

Quackity terminó en el equipo 2, pero hasta el equipo 3 no salió ninguno más de ellos.

-Jugador 187.

Era George. Rezó para no ser el único de su equipo, ya que eso significaría probablemente enfrentarse al otro equipo. Por suerte, salieron Wilbur y Tubbo, pero el chico se asustó al ver que Tommy se quedaba fuera de su equipo.

Eso significaba que alguno de sus equipos, ya fuera el de Quackity, Tommy o el suyo, iba a quedar eliminado.

George respiró hondo y se dirigió, junto con Wilbur y Tubbo, hacia la fila de su equipo.

-El siguiente juego se llama "tira y afloja" -dijo la voz -. En este juego, dos equipos se enfrentarán tirando de una cuerda. El equipo que tenga menos fuerza será arrastrado hacia el centro y caerá al vacío.

George comenzó a tronarse los dedos, nervioso.

-Primero se enfrentarán el equipo 1 y 2.

George observó con preocupación cómo Quackity subía las escaleras de la plataforma con el resto de su equipo. El chico le había caído bien y le daría pena que muriera tan pronto.

-Preparados... listos... ¡ya!

Ambos equipos comenzaron a tirar de la cuerda, pero el equipo 2 llevaba una clara ventaja desde el principio. No necesitaron mucho tiempo para que el equipo 1 cayera al vacío.

George tragó saliva con dificultad. No se veía capaz de enfrentarse a Tommy.

-Equipos 3 y 4, por favor, diríjanse a las plataformas -pidió la voz. George obedeció, nervioso, y subió las escaleras detrás de Tubbo.

-Sabéis que nos vamos a enfrentar a Tommy, ¿verdad? -dijo Wilbur, tan nervioso como los otros dos chicos. George asintió con la cabeza y se aclaró la garganta.

Sin decir nada más, los tres chicos ocuparon su lugar delante de la cuerda. George ni siquiera quiso levantar la mirada para ver a Tommy, así que esperó a que la voz diera la señal para empezar a tirar.

-Preparados... listos... ¡ya!

George agarró la cuerda con fuerza y comenzó a tirar todo lo fuerte que pudo. Al principio se puso algo nervioso porque vio que el equipo contrario comenzaba ganándoles, pero poco a poco recuperaron la cuerda al centro y comenzaron a empujar al equipo contrario hacia ellos.

Las manos de George comenzaron a sudar cuando vio al equipo de Tommy peligrosamente cerca del borde de su plataforma.

No quería verlo. No quería ver cómo Tommy caía, pero tampoco podía quitar su vista de la cuerda.

El primer miembro del equipo 4 cayó al vacío, y a partir de ahí comenzaron a caer todos. La presión de George bajó de pronto cuando vio a Tommy caer. De pronto, un mareo lo invadió y sintió ganas de vomitar, pero intentó no desmayarse de nuevo.

En cuanto la voz anunció que habían ganado el juego, George se giró hacia Wilbur, quien tenía la misma expresión que él.

-George, estás demasiado pálido -murmuró.

-No me encuentro bien -contestó el chico -. Iré al baño.

Bajó las escaleras con rapidez y entró en el baño. Se lavó rápidamente la cara con agua y reprimió sus ganas de vomitar.

-Deberías intentar tomártelo con más calma.

George se giró para encontrar a Dream parado en la puerta.

-Eso intento -murmuró el chico, echándose más agua en la cara.

-Pues no parece que funcione -dijo el rubio -. Al fin y al cabo, esto acabaría pasando en algún momento.

-Yo... sí, ya lo sabía -balbuceó George, avergonzado -. Pero... no sé, nunca lo vi tan real.

-Bienvenido al juego del calamar -bromeó Dream, consiguiendo sacarle una pequeña sonrisa al chico.

George suspiró mientras cerraba el grifo e intentaba tranquilizarse.

-Te ves lindo hoy -murmuró Dream.

George lo miró a los ojos y no pudo evitar sonrojarse, lo que por lo visto le pareció gracioso a Dream.

-¿Qué pasa, te pongo nervioso? -preguntó, haciendo sonrojar aún más a George.

-Um... no -vaciló George. La risa de Dream le gustó, le pareció bonita -. Eres un idiota.

-Lo seré, pero te has puesto todo rojo -contestó entre risas.

-Uhg, cállate -dijo George, empujándolo suavemente. Dream rio y lo empujó a él, empezando una pelea en la que los dos comenzaron a pegarse y a reírse.

En un momento dado, Dream consiguió agarrar las muñecas de George y sujetarlas con fuerza. El tacto de las manos de George le pareció agradable, eran suaves y pequeñas en comparación con las suyas.

-Ríndete -le dijo a George, quien no paraba de reírse.

-Está bien, me rindo -aceptó el chico, mientras Dream le soltaba las muñecas.

-Bueno, George, tengo que irme -se despidió Dream -. Debo preparar unas cosas con otros compañeros. Probablemente tendrás que buscarme esta noche.

George no pudo evitar darle otro sentido a la frase, riéndose ante aquella perspectiva.

-Bueno, no me refería a eso -rectificó Dream, George contagiándole su risa -. Bueno, sabes a lo que me refería, idiota. Nos vemos luego.

Una vez George se calmó, se quedó pensando en lo que Dream le había dicho.

Verlo luego. Lo iba a necesitar por la noche.

George no comprendió a qué se refería, así que simplemente salió del baño para reunirse con Wilbur, Tubbo y Quackity.

𝗽𝗹𝗮𝘆𝗲𝗿 𝟭𝟴𝟳  [ 𝖽𝗋𝖾𝖺𝗆𝗇𝗈𝗍𝖿𝗈𝗎𝗇𝖽 ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora