Dedicatoria
Bruce Yamada seguía con la mirada a Shay una niña bastante linda, era muy popular en la escuela, aparte era amable con todos incluso era reconocida por los profesores ya que la chica tenía muy buenas calificaciones.
—bruce ya quita esa cara, me das miedo.. -hablo Emy la hermana pequeña del pelinegro-
—perdon. -se disculpo el mayor-
—¿Te gusta Shay, verdad? -hablo ella a su hermano, y haciendo que sus cejas subieran y bajaran-
—no, no me gusta solo pienso que es genial.
Mentiroso
—ya.., ya me tengo que ir Bruce tengo clases de matemáticas. -se despidió ella con la mano dirigio a su salon-
—tonta emy -hablo Bruce- ella no me gusta ¿O si?...
El chico dudo un poco lo que decía, decidió dejar eso de lado e ir a la biblioteca. Tenía una hora libre ya que la maestra había dado a luz y le habían dado incapacitación. Llegó a la biblioteca y agarro un libro, se sentó a leer pero sintió la presencia de alguien frente suyo.
Oh dios mío.
—hola Bruce -saludo una chica en específico, Shay-¿Me puedo sentar?
—hola Shay, y si, si puedes. -hablo el tratando de sonar normal pero los nervios se lo comían-
—gracias -la joven se sentó al frente de Bruce coloco un libro entre sus manos y comenzó la lectura del libro-
Mientras ella leía tan concentrada ese libro, Bruce le dedicaba miradas la veía detenidamente ese cabello largo rojizo y sus labios tan finos que tenía..., Sus ojos color esmeralda, era perfecta ante sus ojos.., Shay empezó a sentir una mirada encima de ella y levanto su mirada hacia Bruce, el chico miro a otro lado tratando de ocultar su nerviosismo, a Shay le dió ternura al ver a Bruce en ese estado.
—y tienes hermanas? -pregunto ella-
—oh si, emy va en primer grado. -respondio el- y tú?
—tengo un hermano mejor se llama Alessio, igual va en primero.
—oh.. y que te gusta hacer?- pregunto nuevamente el-
—me gusta hacer de todo cocinar, leer, la jardinería.., cosas normales, te he visto jugar un par de veces, juegas muy bien. -dijo ella había el pelinegro con una sonrisa, la sonrisa de Shay hacía que en sus mejillas se hicieran ulluelos, eso le encantaba a Bruce-
—muchas gracias.. y tambien he visto tu jardín ¿Tu lo cultivaste? -pregunto con admiración el-
—si, bueno con ayuda de mi mamá, aprovechando que sabes dónde vivo.. deberías pasar un día a tomar café... -dijo ella-
—gracias y tú igual debería ir un día a mi casa, no queda tan lejos de la tuya.. -hablo el- aprovechando podríamos ir a comer un helado algun día, yo invito
—¿Es un cita, Yamada? -pregunto ella esperando que dijera algo como “una salida como amigos"-
—asi es, es una cita, Shay -dijo el-
—el sábado a las 3? -pregunto ella-
—el sábado a las 2 -afirmo el- voy por ti.
—esta bien. -dijo ella con una tierna sonrisa-
Ambos se miraban con un brillo en los ojos.. Bruce anelaba que ya fuera sábado para salir con la chica de ojos bonitos. Y ella anelaba salir con el. ¿Quien diría que por ir a la biblioteca sería un impulso para una joven pareja en un futuro?