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Bill

Llegue a casa y ahi estaban los chicos esperando mi llegada impacientes, sabia que me preguntarían por Judith y como había ido la cita, fue perfecta, nunca quise tener tanto con nadie y menos con el poco tiempo que la conocía.

—Bill cuéntanos todo— dijo Georg —ven siéntate— señalo un sitio al lado de mi hermano en el sillón.

—Bueno, la cita ha ido de maravilla— celebraron y esperaron mas información —la he llevado a su casa y...

—¿Y que?— dijo mi hermano con una sonrisa de oreja a oreja.

—La he besado— solo bastaron esas 3 palabras para que se levantaran y celebraran.

Me levantaron del sofa y me agarraron en brazos, se alegraban por mi, de verdad lo hacían, por un momento me olvidé de que le estaba mintiendo a mi propio hermano pero no quise arruinar el momento.

—¿Nueva novia para vernos ensayar?— pregunto Gustav ahora sentados otra vez.

—No sé lo que somos, aún, pero lo averiguaré— era la verdad, no se lo que éramos pero me encantaba lo que estábamos formando.

—Faltas tú Tom— dijo Georg.

—Ninguna es suficiente, ya tuve a la mejor, ahora todas me saben a poco— sabia a lo que se refería mi hermano, a Dilaila.

—¿Dileyla?— Gustav hablo.

—Dilaila— mi hermano corrigió —Bill vamos dime que te acuerdas de ella ¿Era la mejor a que si?— no sabia que decir, me bloqueé.

—Si, sin duda ella era la mejor amiga y la mejor novia pero Tom— me miro atentamente —supérala, no van a haber mejores pero seguro que alguna es suficiente créeme, nunca pensé encontrar una mejor amiga tan buena como ella y tenemos 3 —dije intentando convencerle.

Dilaila estaba aquí, en la misma ciudad que nosotros y no fui ni voy a ser capaz de decírselo, quiero que lo sepa pero tengo miedo de lo que pueda pasar.

—Ya la superé pero sigo sin encontrar a la indicada— suspiró Tom —tardará un poco más en llegar— se levantó y se fue a su habitación.

—¿Tan enamorado de ella estaba?— pregunto Gustav.

—Estaba más que enamorado, es el amor de su vida.

Me levanté y fui a ver como estaba Tom, no quería hacerle sentir mal.

—Tom— dije entrando, lo vi tapado con la manta y mirando fijamente al techo.

Tom

Claro que la había superado, solo fue un amor de críos pero aún así no encontraba ninguna a su altura, ninguna se le asemejaba, ella era perfecta, todo lo que siempre quise y nunca tendré.

—Tom— entró mi hermano a mi habitación.

—Lárgate.

—No quiero que estes triste por ella, me escuchas— dijo en tono de pregunta y asentí.

—¿Recuerdas su cumpleaños número 11?— le pregunte a Bill.

—Si, y nunca lo olvidaré pero tenemos que pasar página— me cabreaba que no la echara tanto de menos como yo —han pasado ya 9 años, no sabemos ni dónde esta.

—Quizás si nos acordáramos de su nombre completo la podría encontrar pero todo lo de esos años es borroso, me cuesta recordarlo.

—O quizás una parte de ti no quiera recordarlo— mi hermano tenia razón, nunca acepté la realidad y quise olvidarla, reprimí sus recuerdos en una parte de mi.

Remember me // Tom KaulitzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora