Elígeme (saga quiéreme)

Capítulo 5

 Me dormí casi todo el camino restante hasta que cuando desperté sentí una mano que avanzaba desde mi rodilla hacia arriba

-¿Qué te sucede?- pregunte yo sin abrir los ojos

- quería  ver si tenías los mismos atributos que Leila, enséñame

-jajaja si claro

-¿Qué? Dudas de que nunca hay tocado nada de ella

-obvio, ella me lo dijo; además confió en ella

-jajaja  confiar en ella es como confiar en  que tu mejor amigo jamás se va a enamorar de ti, te mintió y ese día en tu departamento ¡uuffff! Simplemente maravilloso

-¿Cómo que en mi departamento?

- si ya sabes, un día Leila me llamo y me dijo que me quería ver, pero no estaba disponible mi casa así que te robo las llaves y paso lo que tenía que pasar, por cierto el anillo de plata.... Yo lo tengo; lo tome por sino querías verme y linda ropa interior la del segundo cajón de tu tocador

Estaba sorprendida, no sabía cómo reaccionar ante aquella confección

-¿Qué se creen par de tarados? Párate aquí, me voy a bajar

-no seas exagerada, ese papel no te queda

Estaban se paró a media carretera, me desabroche el cinturón y me baje, Esteban volvió a conducir pero cuando iba yo caminando aprovecho un charco y me mojo toda la ropa, bajo el vidrio y dijo:

—súbete ahora, no tengo tiempo para estos juegos

-vete muy lejos, no pienso subirme

-a ¿no?

Esteban saco el delicado anillo de plata, el único recuerdo de mi padre

-si me subo al carro yo solo; no me volverás a ver ni a mí ni al anillo

-okey – y seguí caminando- no te quiero en mi vida

-como quieras-Esteban se subió al carro y arranco en dirección a la ciudad, no sin antes mojarme otra vez.

Pensaba en llamar a Pablo pero olvide mi mochila con mi celular y todos mis útiles para el día siguiente se habían marchado junto con Estaban

Trate de caminar al pueblo más cercano, hasta que por fin encontré un teléfono, le llame a Pablo para que viniera a recogerme, este llego 4 horas después debido a dos razones:

1-   Estaba con los otros chicos en la pizzería y le pedí que no dijera nada, así que necesitaba el momento adecuado para escaparse

2-   ¡NO SABIA DONDE ESTABA!

Cuando llego me subí lo más rápido que pude, Pablo no dijo nada solo me miro con cara de reproche, pero la felicidad del silencio no duro tanto ya que al llegar a una gasolinera Pablo se dirigió a mi

-Ellie... ¿no quieres hablar de lo ocurrido?

-no- dije con la voz hecha un susurro- solo déjame en esta dirección- y le tendí la hojita arrugada con la ubicación de la casa de Esteban

-Ellie, no creo que sea correcto

-Pablo por favor- sentí como las lágrimas contenidas luchaban por salir

Cuando llegamos me despedí de Pablo rogándole que no me esperara, me senté en los escalones de la casa del imbécil de Esteban. Cuando el llego eran alrededor de las 10:00 de la noche y como el don juan que era estaba acompañada de una chica muy joven que no aparentaba ni los 15 años y tan solo el verla me hacía sentir una mezcla de sentimientos inexplicables en mi cabeza y tenía una cosa clara, si estaba ahí parada viendo ese espectáculo era porque el tenia mis cosas y no cualquier cosa si no que el anillo de mi papa

-oye solo vine por mis cosas- dije con una voz tan fría y  cortante  que yo misma me sorprendí- incluyendo el anillo Esteban

-se las di a un tipo el cual aseguraba que esas eran tus cosas

-¡Qué!, ¿y cómo era ese tipo?

-era de estatura media, cabello pelirrojo y sonrisa de anuncio de pasta de dientes

Me quede pensando en quien podría ser  y solo se me vino alguien con esas características a la mente... Thomas. Volví a mirar a Esteban y con voz ronca le dije

-dame mi anillo ya

-te dije que si me iba solo te olvidabas de mí y de tu anillo, yo no lo decidí, tu solita te lo búscate; ahora sal de mi vista y déjame disfrutar por fin de mi noche- me quede quieta y por un segundo tenia todos los sentimientos combinados y solo logre hacer una cosa.

Salí corriendo en dirección a mi casa, pero en el trayecto oí como un auto me tocaba el claxon y al darme la vuelta me di cuenta de que era  Pablo y Daniela, cuando los vi ella me indico que me subiera  y ya adentro me atosigaron con un montón de preguntas

-Ellie estábamos muy preocupados por ti –a lo que pablo la interrumpió y contesto

- ¿enserio creías que no te iba a esperar¿

-estoy bien, solo llévenme a casa de Thomas- conteste yo

-¿con Thomas?, ¿pero porque Ellie?

-tengo algo importante que recoger

-okey- dijo ella pero Pablo con cara de pocos amigos solo encendió el auto y  se dirigió a donde le indique

Me pare  en el tapetito que decía bienvenido en una hermosa caligrafía y las minúsculas mariposas empezaron a danzar en mi estómago ¿Por qué estos sentimientos tenían que regresar en este preciso momento? por mi cabeza pasaban un montón de imágenes

Thomas tomándome la mano

Thomas y yo viendo una película

Thomas diciéndome que era bonita

Miles de momento que eran casi imposibles de olvidar.

-Eres una mujer fuerte Ellie, toca de una vez- gritaba mi conciencia

Y eso hice, me arme de valor y posee mi dedo índice sobre el timbre