LA HERMANA MENOR DE LOS GEMELOS TSUGIKUNI

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[Narrador]

Sorprendentemente los hermanos Tsugikuni se encontraron con su hermano mayor, Kyomi estaba muy feliz de verle y no dudo en abrazarlo siendo correspondida por este. Con los meses Yoriichi enseñó a todos los miembros y a sus hermanos su estilo de aliento sin embargo la única capaz de realizarlo a la perfección fue Kyomi, todo el resto tuvieron que modificarla y adaptarla a sus capacidades.

— Kyo quiero pedirte un favor— Michikatsu y Kyomi se encontraban cenando juntos una noche.

— Claro, dime ni san— la menor le dedicó una cálida sonrisa.

— Quiero que aprendas mi estilo de respiración.

— Si eso te hace feliz lo intentaré — ella volvió a sonreírle.

Al cabo de tres meses Kyomi dominó el estilo de Michikatsu, sin embargo una noche escuchó a sus hermanos discutir sobre que aliento debía seguir utilizando la menor de los Tsugikuni. Ella se metió en su discusión y hablo con firmeza.

— Si van a pelear por cual aliento utilizaré ya no usaré ninguno de los suyos crearé el mío propio— habló fuerte y con enfado sorprendiendo a los mayores pues ella era muy tranquila.

Y tal como dijo hizo creó su propio estilo en base a ambas respiraciones solar y lunar creando la respiración del eclipse.

[Kyomi]

Estaba en una misión, investigaba un poco para saber a qué me enfrentaba. El pueblo es pequeño así que no me costó mucho recorrerlo y preguntar a todos los que me encontraba.La noche ya había llegado y el aroma del demonio apareció, corrí en su búsqueda y lo encontré en la entrada del pueblo, no venía solo otros dos demonios estaban con el.

-Respiración del eclipse primera postura rueda de luna- salté y giré rebanando al primer demonio a la mitad -respiración del eclipse segunda postura eclipse total de sol- de dos cortes diagonales al cuello corté a los dos demonios restantes.

Meses después estaba junto a Yoriichi ni San, mientras caminábamos nos encontramos a una mujer y a un hombre, el aura del masculino era amenazante y terrorífica ni San se dio cuenta de que era un demonio y lo atacó combinando las doce posturas de su respiración y al parecer al demonio le estaba costando regenerarse que cuando ni San trató de atacarlo de nuevo explotó en muchos pedazos que ni San empezó a cortar.

La mujer que estaba con él empezó a maldecirlo y nos contó que ni San casi lograba acabar al rey de los demonios, dejamos vivir a la mujer que su nombre era Tamayo y nos fuimos. Sin embargo una mala noticia llegó o para ser más precisa dos, la primera... Michikatsu se había convertido en demonio y para rematar nosotros fuimos expulsados de la organización por no matar a Muzan y la segunda por haber dejado viva a Tamayo.

Yoriichi y yo nos fuimos de regreso a nuestra antigua cabaña pero cuando llegamos había un hombre y una mujer que estaban siendo atacados por dos demonios, nosotros rápido sacamos nuestras katanas y los decapitamos. La mujer iba a dar a luz así que la ayudé con eso mientras ni San hablaba con el hombre llamado Sumiyoshi.