Merecedor [Soukoku]

Primer amigo

Dazai conoció a Chuuya, por simple casualidad.

No es que sea fanático de escuchar conversaciones ajenas, pero cuando nombraron varias personas a un tal "Chuuya Nakahara." su curiosidad había crecido de manera ascendente.

Aun así, nunca lo identifico, no sabía nada acerca del aspecto contrario, ademas no tenía ni motivos para hacerlo.

Pero todo se fue a la borda cuando un niño extraño fue directo a su lugar acomodando sus cosas y seguidamente sentándose a su lado.

No es que el niño fuera raro de aspecto físico o de su personalidad, en realidad, era raro que se sentará alado de el.

Por el resto de su vida de primaria, nunca nadie se había sentado alado de su persona.

Algunas veces escuchaba a los compañeros de su curso catalogarlo como "El rarito de la clase." Aun qué trataba de pensar y encontrarle un sentido a esas palabras, nunca lo logro.

Cuando observo como el pequeño de cabello anaranjado se sentaba a su lado, obtuvo varias miradas de personas que presenciaban el acto, algunos le miraban con disgusto, otros con sorpresa.

Pero al parecer, a él contrario ni le importo lo mas mínimo.

Se quedo observando los movimientos del contrario con cierta sorpresa y curiosidad, no había hablado nunca con el.

El contrario sacaba sus cuadernos y sus útiles con tranquilidad, aun que se notaba en su aspecto qué estaba feliz por el primer día de clase.

Había parado un momento sus acciones al notar susurros. Entonces comenzó a observar su alrededor.

Primero se encontró con la mirada de la persona que se sentaba a su lado. Después de algunos estudiantes, pero estos últimos no les importo mucho.

— ¡Hola, Soy Nakahara Chuuya!

Silencio. Fue lo que obtuvo de un principio, para después escuchar una voz algo temorosa y baja del contrario.

— Osamu Dazai.

Su sonrisa creció, ignorando algunos Jadeos sorpresivos de la gente que había a su alrededor.

— ¿Esta bien si me quedo aquí? — Su voz era aun animada, señalando el lugar que estaba sentado.

Con algo de dificultad y confundido, Asintió ante la pregunta de Chuuya.

— Oye, ¿De verdad eres de este curso? Puede qué te hayas equivocado, los niños chiquitos son del turno de la mañana. — Movio levemente su cabeza, para un costado.

Un silencio algo largo se puso entre ambos, se había comenzando a sentir nervioso por eso. Pero luego al ver el enojo del contrario (muy tierno en ese momento) le dio algo de diversión la situación.

— ¡Tengo la estatura de alguien de mi edad! — Su voz había salido como un grito, y eso le dio algo de risa.

— Si tu lo dices...

El contrario iba a soltar varias vulgaridades al contrario, pero su garganta se cerró. Por que; primero, le enseñaron a ser educado, y el último (el que más le importo) la profesora ya llego a la clase.

Aun qué la profesora haya llegado, el no se movio del lado de Dazai, eso le alegro un poco.

Aun así tenía una mirada inexperta y miraba a la profesora con atención de su clase. Hasta qué le llego un papelito.

"Dazai, quieres salir hoy a él almuerzo juntos? :D"

Agarro el lápiz qué estaba a su alcancé y escribió con una caligrafía perfecta.

"No."

Le entrego el papel al contrario, fingió seguir prestando atención, pero miro de reojo al anaranjado, curioso de la reacción del contrario.

Lo único que observo es como Chuuya tenía una expresión molesta y a la vez triste. Por un momento sintió pena, hasta que leyó el papelito qué le devolvió.

"Ok, ojalá te saques cero en la prueba >:("

Se rio a lo bajo, aun así, ambos salieron juntos al almuerzo. Y por primera vez, Dazai estuvo jugando y divirtiéndose con alguien, ya no se sentía tan solo.

Y desde ahí, comenzó a sentir calido su ser, cada que estaba con Chuuya.