Habían pasado dos años, los mejores dos años para la hermosa pareja. T/n se había relacionado mucho con el clan Uchiha y ya la trataban como una más de la familia, tan así que a reuniones del clan la invitaban. Eso enorgullecía a Madara. Mientras que con el entrenamiento T/n ya se había vuelto mucho más poderosa que antes y ya sabía muchos jutsus, también se desenvolvía bien
Un día común y corriente Izuna, Madara, Hashirama, Mito, Tobirama y T/n estaban cenando todos juntos
— T/n cuando era pequeña era todo un caso —
— Era super tranquila, solo dices eso porque no te gustaba cuidarme —
— Mentira, yo amaba cuidarte —
— Mejor cállate Hashirama, yo era el que siempre la cuidaba y le cambiaba los pañales — Dijo Tobirama egocéntrico
Todos rieron por eso, Izuna se puso un poco colorado por el calor de la estufa a leña, era invierno y estaba cerca la navidad
— ¿Que tienen planeado para navidad? — Dijo Hashirama
— No se, ¿Qué vamos a hacer princesita? — Dijo Madara mirando a su novia causando varios "Uuuuh" por los presentes
—- La navidad anterior la pasamos en el clan Uchiha, esta deberíamos pasarla acá no? —
— Tienes razón —
Siguieron hablando de los planes para navidad hasta que salieron con el tema de el casamiento de Hashirama y Mito, ambos estaban comprometidos
— Hablando de ese tema, quería decir algo con respecto a eso — Dijo Madara dejando su vaso de Sake sobre la mesa, los ojos de Hashirama brillaron como si ya supiera que iba a hacer
Madara se levantó de su asiento y se incó a un costado del de T/n causando sorpresa en todos y que la chica se cubra la cara con ambas manos quedando colorada
— T/n, eres la chica de mis sueños y con la quien quiero estar por el resto de mi vida. Sabes que las cosas románticas no se me dan pero Hashirama me ayudó con esto. En fin, ¿te casarías conmigo? —
Madara sacó una cajita de su bolsillo y la abrió dejando ver un hermoso anillo de compromiso, tenía grabada la fecha en la que se hicieron novios y sus apellidos "𝐔𝐜𝐡𝐢𝐡𝐚 & 𝐒𝐞𝐧𝐣𝐮" era sencillamente hermoso
— Si, si quiero Madara! —
El mayor le puso el anillo en su mano izquierda con una sonrisa tenue mientras que la chica se tiró a sus brazos abrazándolo mientras todos los presentes sonreían y decían varias cosas, Hashirama había logrado sacar una foto de cuando Madara estaba incado con el anillo frente a T/n
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Pasaron los días hasta el mes de diciembre, exactamente el 16 de diciembre, era una noche tranquila, según T/n Madara estaba en el distrito Uchiha resolviendo sus asuntos como líder y su hermano en la oficina del Hokage haciendo sus cosas. Hasta que se escuchó un estruendo por donde estaba T/n, en ese momento se puso muy nerviosa, decidió ir a ver que era y vio la peor escena que sus ojos podían ver
Hashirama había atravesado con una katana el pecho de Madara. Los ojos de T/n no tardaron en aguarse al ver a su amado suspirar. Se acercó lo más rápido que pudo y empujó a Hashirama el cual ante la sorpresa cayó al piso un poco alejado. T/n se acercó a Madara mientras lloraba desconsoladamente
— Madara...Madara porfavor.. —
— Mi princesita... — la cara de Madara era de completo dolor pero aún así mantenía una pequeña sonrisa al verla a ella, a su mundo
— Madara, yo te voy a ayudar... — La chica sacó la katana y empezó a aplicar ninjutsu médico en Madara pero este la tomó de la mano con delicadeza
— Ya no hay vuelta a atrás cariño... —
— Si la hay! Déjame ayudarte —
— T/n, sigue adelante sin mi. Cuídate mucho y prométeme que sea lo que sea...nunca te vas a rendir —
— Lo prometo... —
— Te amo mi Princesita... —
Madara cerró sus ojos despacio mientras el agarre en la mano de T/n se iba aflojando hasta que en un momento la mano de Madara cayó al duro suelo mientras la lluvia empapaba su cuerpo y a T/n la cual lloraba desconsolada arriba del pecho de el Uchiha
— Madara...MADARA!!!! —
El grito que soltó la chica fue tan desgarrador que se sintió por toda la aldea llamando la atención de muchos ninjas que se acercaron más que rápido a la escena. T/n no se quería separar del cuerpo del Uchiha mientras los otros ninjas ayudaban a Hashirama el cual miraba a su hermana y cada vez que está lo veía en sus ojos solo había odio y dolor hacía el
— MADARA!!!!! DIME QUE ES UNA MALDITA BROMA! —
Los gritos de aquella rubia destrozaban a los ninjas que la veían sin valentía de acercarse al ver tal escena, como el amor podía llegar a tanto..?