- Supongo que deberíamos pedirle disculpas a aquella hada si la volvemos a ver... - pienso mientras terminaba de ponerme mi pijama -. Aún si es el origen de todo este lío, tal vez no fue lo más amable llamarla "fantasma" *suspiro* Bueno, mañana será otro día...
Mientras me recostaba en mi cama y me cubría con mis cobijas no podía dejar de pensar en la penitencia de esta ocasión y si en esta ocasión nos afectaría a ambas o solo a una de las dos.
- ¿Qué significará? Ese juego puede ser tan impredecible a veces que realmente no tengo idea de que esperar mañana... *Bostezo* Aunque bueno, supongo que por ahora puedo no pensar tanto en eso
Estaba inquieta sin saber lo que ocurriría mañana; pero la noche se sentía tan tranquila y cómoda que realmente no podía evitar que el sueño poco a poco comenzara a acogerme. Al final terminé por caer dormida sin darme cuenta, cobijada por mis sábanas y con mis temores opacados por el sueño.
~*~
Una leve brisa comenzó a rozar mi mejilla ¿Había acaso dormido con la ventana abierta? Extrañada comencé a abrir mis ojos con algo de desgano, pensando en lo bien que había descansado esa noche.
- Diablos... Si tan solo no hubiese sentido ese leve frío, seguiría durmiendo... - me decía entre reclamos somnolientos mientras luchaba por incorporarme -. Vamos You... Q- Que el sueño no te gane... *bostezo* Es que... Ugh- Mi camita... - decía mientras abrazaba una de mis almohadas -. So- Solo un poquito más... So- Solo... ... ¡No! ¡Vamos You! Un poco de autocontrol...
Luego de mis propias palabras de ánimo, finalmente me quité las cobijas y me levanté de la cama, tambaleándome un poco. Era algo extraño, pero casi se sentía como si hubiese dormido una eternidad, ya que incluso mi cuerpo todavía estaba despertando apenas, dándome ligeros cosquilleos cada vez que intentaba dar un paso.
- ¡Wow! O- Ok... ¿Cuánto se supone que dormí? - confundida vi el reloj de la habitación; eran las 10 de la mañana. Había dormido un poco más de lo usual, pero nada tan exagerado como para sentirme tan cansada ahora -. Diablos... Ahora solo falta que termine por resfriarme... *suspiro* ¡Oh! Hablando de eso...
Al ver la ventana de la habitación, esta estaba completamente cerrada. No tenía sentido, entonces ¿Por qué sentía escalofríos ahora? Incluso en este instante podía percibir como ligeros soplos de viento recorrían mi cuerpo, eso era imposible.
- Tal parece que en verdad pesqué un resfriado en alguna parte... Ugh- Torpe You... - dije fregándome con la cabeza, cuando de repente sentí algo extraño -. ¿Huh? Q- ¿Qué es esto?
Era extraño, pero se sentía como si mi cabello se hubiese despeinado tanto que hubiese quedado abultado en dos partes de mi cabeza. Lo tenía algo largo como para que eso pudiese pasar, pero nunca antes me había ocurrido, en toda mi vida.
- ¿Tanto me moví en la noche? *suspiro* En ese caso iré a peinarme... Moriría de la vergüenza si Riko me llega a ver así
Ya dentro del baño tomé mi cepillo, dispuesta a comenzar a arreglar mi alborotado pelo; hasta que en mi reflejo del espejo vi algo que hizo que lo soltara de la sorpresa.
- ¿¡Qué!? E- ¡Espera un segundo! - me decía mientras me acercaba más al espejo, solo para comprobar que lo que veían mis ojos no era mi imaginación -. E- Eso no es mi cabello... So- Son... ¿¡Orejas!?
Efectivamente lo eran, solo necesitabas verlas un par de segundos para notarlas, eran como las orejas que verían en un lobo, o algo así. Y, de hecho, justo en el momento que grité pude ver algo más que no debería ser así. Mis dientes... Acaso lo que veía al frente eran...
- ¿¡Colmillos!? - me decía mientras abría mi boca un poco más para verlos mejor -. ¿¡Qué rayos me pasó esta vez!? ¿¡EHH!?
Como si toda la sorpresa no hubiese sido suficiente, entonces pude sentir algo más; como si algo hiciese presión en el pantalón de mi pijama. Ya esperando lo que vería me voltee un poco y bajé ligeramente la prenda solo para encontrarme con lo que ya imaginaba; una cola con un brilloso pelaje gris y algo castaño, como mi cabello.
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...Entre dos...
RomanceUn juego que solo se puede realizar entre dos, en el cual si una respuesta es errónea terminará castigando a sus participantes. ¿El castigo? Las coincidencias del amor. Ven y vive está loca historia Yuri en el cuál nuestras chicas favoritas de Aqour...