Vivencias del día y la noche

Palabras

Noviembre de 2020

Existieron tantas posibilidades...

No llegué a explorar ni una cuarta parte de cada una.

Siempre hubo un pero.

Siempre nos faltaron las palabras.

Más de ciento cincuenta mil términos diferentes para decirme una razón...

Pero nos quedamos cortos en la conversación.

Me hablaste por última vez desatando una tormenta con cada palabra...

Y en eso se nos fue la vida, y no pude hacer nada.

Quizá yo no soy la persona indicada, lamento no ser parte de tu vida ahora.

Aún siento que volveremos a encontrarnos algún día...

Solo espero que en ese momento tú no me hayas olvidado...

O quizá sí, para empezar de nuevo.

No lo sé, pensé que no me afectaría en nada y podría controlarlo...

La verdad es que a veces tengo pequeños altibajos donde pienso en ti y me arrepiento de muchas cosas.

Descubrí muchas cosas de mí que me avergüenzan, pero tú me has enseñado a amarlas, a pesar de no aceptarlas del todo, puedo sentirme bien conmigo misma y sé que puedo mejorar.

Mis mejores deseos para ti, no creo que haya alguien como tú, y si existe quizá nunca lleguemos a conocernos...

Espero puedas recuperar esa seguridad que te caracterizaba tanto cuando nos conocimos, la vida no te ha tratado bien últimamente y me duele que sufras, trata de ser feliz, aunque sea sin mí.

Si tú estás bien, me hará feliz saberlo.

Antes podía regresar a ti, pero ahora tengo miedo de herirte volviendo a tu vida, tengo miedo de tu reacción...

Estás mejor sin mí, aunque no quiero, pero esa es la realidad.

Adiós.