Sin Rencores

Cap. 4: Smiley Street

Las dos amigas llegaron a la comisaría, ajenas a todo lo que había pasado en su casa, su prioridad era hablar con el sheriff para arrestar a esos asesinos.

Entraron a la comisaría, que estaba iluminada por una débil y tenue luz blanca, que tintineaba cada cierto tiempo.

-Buenas noches. ¿Qué desean?- Dijo la enchepada y tenebrosa secretaria.

-Queremos hablar con el sheriff- Dijo Mary con decisión.

-Ahora mismo no está, vuelvan mañana- Dijo la secretaria zanjando el tema.

-¿No puede llamarle? Ha pasado algo muy grave- Sugirió Mia.

-Lo siento señoritas, pero no puedo ayudarlas- Dijo la secretaria con firmeza.

Las dos amigas salieron con decepción de aquella lúgubre comisaría, sin respuesta ni solución ninguna.

-No nos queda otra que ir a casa del Sr. Johnson- Sugirió Mia.

-De acuerdo, pero antes pararemos en mi casa para ver que tal están las chicas- Añadió Mary mientras abría la puerta del coche.

El camino hacia su casa fue tranquilo, pero metros antes de llegar a su vivienda, un sujeto se cruzó en mitad de la carretera, obligando a Mary a frenar en seco.

Gracias a los faros del vehículo pudieron entrever la magullada y herida cara de Evelyn, que se acercó al coche tambaleando.

-¿Qué ha pasado?- Dijo Mary con la cara desencajada.

-Han vuelto...- Murmuró Evelyn- Y se han llevado a Maggie- Dijo cabizbaja.

-¡No me jodas!- Dijo Mia impactada.

Rápidamente quiso bajar del coche, pero Mary la interceptó.

-Hemos de permanecer juntas o puede que nos pase algo mucho peor- Dijo agarrándola del brazo.

-¡Todo esto ha sido tu culpa, fue idea tuya la de separarnos!- Exclamó Mia enfurecida.

-¿Podemos hablar esto en otro lado, por favor?- Interrumpió Evelyn con timidez.

Las tres amigas se montaron en el automóvil, el mal ambiente y la tensión reinó entre ellas hasta que una se hizo escuchar.

-Voy a avisar a Alex y los demás- Dijo Mia agarrando su teléfono.

-si estás despierto quedamos en 30 min. en casa de Daisy- Tecleó con rapidez.

-voy, en 15 estoy ahí- Respondió velozmente.

-si puedes avisa a los demás- Finalizó la conversación.

No tardaron más de 20 minutos en llegar a la calle de Daisy, allí ya se distinguían dos figuras, sentadas bajo una farola.

Aparcaron el coche en doble fila y bajaron con habilidad.

-Qué velocidad- Dijo Mary dirigiéndose a Alex y Aaron.

-¿Dónde está Maggie?- Se percató Aaron.

-Se la han llevado- Dijo tajantemente Evelyn.

Alex se quedó sin palabras, cosa poco común en él.

-¿Y Jess?- Preguntó de nuevo.

-Le he escrito, pero no me ha contestado- Contestó Alex.

-Vamos para adentro- Dijo Mary mirando a la casa.

-¿Enserio?- Se pronunció Mia.

Los demás se giraron a verla.

-¿Vais a hacer como que no le ha pasado nada a Maggie?- Exclamó con impotencia.

-¡¿Eso crees?, ¿Qué no nos importa?, ¿Para que te crees que estamos aquí?, para buscar ayuda y acabar con esta mierda de una vez!- Respondió Mary furiosa.

-¡Así no ayudaréis una mierda, hay que ir a por ella y rescatarla de esos cabrones antes de que la maten!- Exclamó con desesperación.

-Estoy con ella- Señaló Aaron.

-Y yo- Dijo Evelyn.

-Hemos de actuar cuanto antes, ¿pero dónde vamos?, no tenemos ninguna pista de dónde se tienen que estar escondiendo- Se percató Aaron.

- Lo único que sabemos de ellos es ese extraño mensaje y que sus ataques se producen cada 7 horas- Destacó Evelyn.

-Mia, busca en Google todas las casas que sean número 7- Dijo Aaron con perspicacia.

-La primera que me sale es una gran mansión en la calle...-Un detalle hizo que se estremeciera- la calle Smiley Street, como la careta que portaban esos tipos- Concluyó Mia.

-¡Tiene que ser ahí, vamos cuanto antes!- Dijo Evelyn emocionada.

-Tú no vas a ningún lado- Dijo Mary agarrándola del brazo.

-¿Por qué?- Exclamó frustrada.

-No quiero cometer el mismo error que antes- Concluyó Mary asustada.

Justo en ese momento se escucharon las ruedas de un coche frenando en seco detrás suyo.

Al girarse vieron a Jessica, que bajó la ventanilla del coche.

-¿Qué me he perdido?- Dijo asomando la cabeza por el cristal.

-Ya tenemos como ir a esa calle- Sugirió Mia.

-Está bien, Mary, su hermana y yo intentaremos contactar con el Sr. Johnson, vosotros id a esa dirección, si encontráis a Maggie avisadnos cuanto antes- Planeó Alex.

Tenían una idea en mente, un buen plan y ganas de venganza, ahora hacía falta que la suerte les favoreciese.