Los Días de Naruto

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Días después Naruto estaba echando en su cama vestido con su unirme militar recordando cuando ingresó al servicio militar obligatorio siendo alejado de su familia y su pareja. Después de un enorme desempeño fue seleccionado para formar parte de las tropas que ayudarían a Vietnam del Sur y Estados Unidos en la guerra. Naruto ahí vio la verdadera naturaleza del ser humano. Alguien que destruye, mata y tortura sin compasión. Los ideales de ayudar al inocente desaparecieron por completo, tantos abusos y masacres que presenció. Presenció que hasta los mismos vietnamitas enviaban a niños como bombas para inmolarse. Para él esa guerra fue el infierno en la tierra y ahora que está en casa no puede tener una vida normal. Siendo de madrugada entró al departamento de sus padres, caminó lentamente para no llamar la atención hasta llegar a la habitación de su hermano, tocó suavemente para que abriera Hinata que estaba sorprendida.

*Hinata: Naruto.

*Naruto: Hinata vine para...

*Hinata: Para que.

*Naruto: Ayer volví a mi casa y no encontré, ¿Qué pasó?

*Hinata: Pasa, pasa...está dormido tranquilo.

*Naruto: Vine para sacarte de aquí como me dijiste que querías.

*Hinata: Si, si pero ven.

Hinata quería besarlo pero el joven se alejó asustado pero ella lo tomó de las manos. Naruto le dijo que iba a hablar con Menma pero Hinata le dijo que estaba borracho y era imposible hacerlo. En eso Menma llamó a Hinata haciendo que asuste, este se levantó para acercarse a ella que estaba asustada. El rubio la tomó del cuello para estrellarla contra la pared mientras que Naruto miraba con el seño fruncido. 

*Menma: ¿No podrías tener mas de dignidad? ¡No ser tan descaradamente puta! ¡Qué le has estado diciendo a este idiota!

Menma le dio una cachetada provocando que Naruto se acerque por detrás y lo inmovilizara. El hermano mayor le dijo que lo suelte porque tenía algo que mostrarle. 

*Menma: Anda Hinata díselo, ¿Quieres que te deje? ¡Díselo carajo!

*Hinata: No.

Naruto abrió los ojos porque Hinata era una completa masoquista además de ser una perra, segundos después mostró una señal de negación para irse de la casa. Tiempo después estaba sentado en un descampado al lado de una pequeña fogata reflexionando sobre todo lo sucedido. Horas mas tarde, siendo las 10 de la mañana, Naruto se encontraba en el hospital central donde trabajaba Sakura. Para su buena suerte la encontró en un pasillo leyendo unos informes, se acercó tímidamente con el objetivo de arreglar las cosas. Sakura se dio cuenta de su presencia logrando asustarse. Ambos no se decían nada, solo se miraban, el joven tocó delicadamente la mejilla de Sakura pero esta se alejó dando a entender que no deseaba regresar con él porque tenía miedo de sufrir mas al lado de él. Naruto sentía que su corazón se rompía en 1000 pedazos, le dolía la cabeza; tanto desorden, tanto caos, todos hacían lo que querían y él se sentía excluido. Se dio cuenta de una cosa y era regresar a la guerra pero para su mala suerte ya había terminado. Pocas horas después estaba en el Instituto terminando uno de sus cursos hasta que encontró a Ino en el comedor del patio y la llevó a un lado para conversar.

*Ino: Ya no voy a ir.

*Naruto: Entonces vamos a conversar a otra parte como querías.