De todo lo que había pasado en los últimos días, entrar al instituto es lo que más miedo me da, llevámos al menos tres minutos en la puerta, pero no soy capaz de entrar, Reece estaba quieto a mi lado esperando, ¿a qué? no merece la pena esperarme, va a llegar tarde a clase, de repente me cogió la mano, le miré y él me estaba mirando, me dedicó una sonrisa de esas suyas que podrían terminar guerras y eso fue todo lo que me dio la fuerza de entrar al edificio.
Mientras andábamos por el pasillo, solo podía mirar al suelo sabiendo que había muchas miradas posadas sobre mí, las notaba como un gran peso que cargar en la espalda, pero lo peor fue entrar en clase, de repente, antes de entrar me fallaron las rodillas, me habría caído de no ser porque Reece me cogió del brazo.
Oye, ¿estás bien?- Negué, no me sentí capaz de mirarle a la cara, me sentía muy vulnerable todo por el único hecho de que al mirar dentro de la clase vió a unos compañeros mirándolo y fue capaz de oír a alguno decir cosas como “que asco”, “si fuese ella me suicidaría”
En ese momento Reece se puso delante de la clase y llamó a todos, tardé unos cuantos segundos en asimilar lo que estaba pasando.
Quiero decir una cosa, si alguno piensa que ahora mismo hacer algún comentario a Liam o decirle algo es una maravillosa idea para pasar el rato está completamente equivocado, a quien se le ocurra hacer algún comentario fuera de lugar ya puede esperar encontrarse conmigo en los descansos. - Yo estaba flipando, no me podía creer lo mucho que mola Reece, ¿Cómo puede ser capaz de ponerse delante de toda su clase y decir eso? y que le hagan caso, encima, después de decirlo se acercó a la puerta me cogió de la muñeca y tiró de mí hacia dentro de la clase me llevó hasta mi sitio se sentó al lado y empezamos a hablar.
Lo peor fue cuando llegó la hora del patio. No sabía a dónde ir ni qué hacer para evitar las miradas incómodas, por suerte Reece se quedó conmigo todo el rato y me ayudó a evitar a todo el que quisiera decir algo que pudiera ser ofensivo, pensaba que nada podía salir mal, pero de un momento a otro las tornas giraron completamente, a Reece lo llamó un profesor para hablar con él y me quedé solo, me senté en una esquina del patio, me puse los cascos y empecé a comerme mi bocadillo, llevaba ya unos 20 minutos de recreo, ya quedaba poco para volver a clase, pero, un escalofrío recorrió mi espalda. cuando escuché que me llamaban.
Me quité los cascos, me levanté del suelo y alcé la mirada, eran un par de chicos algo mayores que yo.
¡Ey pequeñaja!
¿Mh?- le mire a la cara
¿No te da asco ser como eres? Yo me tiraría del balcón y rezaría de nacer en la siguiente vida como un ser humano normal - me empujó y yo me choqué contra la pared, me sentía mareado, pero ellos seguían gritándome insultos.
Nos harías un favor a todos desapareciendo. - Ahí fue cuando me toqué la parte de atrás de la cabeza y vi que tenía sangre, lo último que vi antes de desmayarme fue a Reece corriendo hacia donde estaba con un profesor.
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Hasta la última nota
RandomMi nombre es Liam, soy un chico trans y por fin me he atrevido a salir del armario, pero nunca llegué a pensar que mi entorno cambiaría tanto si lo hacía.