—¿Donar tus órganos a Young-Min? —preguntó de manera incrédula el peli naranja—. No estamos en el siglo veintiuno, puede tener un corazón artificial y seguir viviendo.
—No, el corazón de Young-Min tiene una malformación de nacimiento, nadie ni siquiera sus padres han encontrado una cura, al considerarlo el único hijo y un prodigio para la familia Kwak, decidieron que era inaceptable que su hijo tenga algo que no sea de un humano, con ello me refiero a que tampoco aceptarían a cualquier persona para que le done los órganos y yo fui seleccionado para ello.
—Aún así, no se porqué ir tan lejos para implantarte el nanobot y hacer que no lo desobedezcas, eso no es de humanos —Taehyung frunció sus labios—. Ni con los animales hacen eso.
—Lo que sé desde que llegué a la familia Kwak, es que fui adoptado para servir a Young-Min, eso me lo dejaron muy en claro sus padres —Jungkook jugó con sus dedos—. Tener un cuerpo saludable, hacer ejercicio, tener una buena alimentación, contar las calorías y no ingerir de más, exámenes de sangre, chequeos en los hospitales, nada de tomar bebidas alcohólicas o fumar para no dañar mi cuerpo.
Taehyung no pudo evitar sentirse mal, esas personas no parecían seres humanos, sino monstruos controladores disfrazados con piel humana.
—Si Young-Min necesitaba algún trasplante, para eso estoy yo, claro que al final terminaría siendo inútil. Nadie quiere a una persona mutilada a su lado. En algún momento de mi vida me sentí un estorbo, me sentía como un cordero siendo cebado para después ser degollado, sin embargo, dejó de importarme después de un tiempo.
—¡JEON JUNGKOOK! —bramó Young-Min quien abrió la puerta de golpe.
(...)
«Siempre supe que era alguien más que podía ser desechado, aunque Young-Min lo negara y me dijera que no, me hizo vivir una bonita mentira».
—ERES UN COMPLETO IDIOTA —Young-Min le tiró todas las pruebas que le había arrebatado de las manos del menor en la cara de Jungkook—. ¿CREES QUE SIENDO MEDIOCRE PODRÁS IR A LA MISMA UNIVERSIDAD QUE YO?
Jungkook parecía un cachorro regañado ante las crueles palabras de su “hermano”.
—Te voy a enseñar y más te vale que no me jodas porque no dudaré en hacer lo necesario para que te entre en la cabeza las fórmulas que tienes que aprender.
«Young-Min siempre ha recurrido a la violencia, aunque no tuviera motivos, se desquitaba el enojo conmigo, poco a poco, su trato se convirtió en algo normal para mí».
El pelinegro miró sus brazos cubiertos de moretones.
«Aunque Young-Min me llegaba a atraer en varios sentidos, decidí aislar mis sentimientos porque no sería tomado en cuenta, al fin y al cabo solo soy alguien desechable».
—Jeon Jungkook. —llamó Young-Min. —Vámonos juntos a casa. —propuso Young-Min.
Los dos amigos de Jungkook apellidados Kim miraron a la persona que llamaba a su amigo.
—¿Son los amigos de Jungkook? Me disculpo, debí parecer grosero, me llamo Kwak Young-min y soy el hermano de Jungkook. Me gustaría disculparme ofreciéndoles un helado.
Jungkook no pudo ocultar su sonrojo, que su hermano le hablara era nuevo en el período de la preparatoria.
—¿De verdad? —dijo el chico de hoyuelos que era unos cinco centímetros mayor que Jungkook.
—Si, ¿por qué mentiría? —Young-Min sonrió.
—Sabes que no es necesario hacerlo, ¿cierto? Somos extraños aunque te hayas presentado —dijo con desconfianza SeokJin, sentía que algo estaba mal con ese hermano de su amigo.
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𝙳𝚘𝚗'𝚝 𝚂𝚊𝚢 𝚈𝚎𝚜 ||TaeKook||
Fanfiction"Me he vuelto loco desde el momento en que te vi decir que sí". El mundo por fin comenzó a avanzar por el camino ideal, por la evolución y su aceptación. Un lugar acogedor donde no importa que eres, importa lo que sientes y buscas. Es en un mundo co...