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Estaba casi inconsciente. Con el viento frío de aquella noche, el mareo se había vuelto aún más intenso.
Me encontraba recostada en el asiento, borracha. Completamente vulnerable. Podía sentir su fría mano sobre mi pierna.
Esto era el cielo? o acaso el infierno?

Sabía que con el a mi lado, estaba nadando en aguas peligrosas.

Aquella noche estaba de esa manera debido a que me había permitido el lujo de tomar lo que quisiera. Me sentía estresada. Pasaban muchas cosas por mi mente, en la secundaria, en mi vida.
Y Tom lo sabía. El sabía todo de mi. Me conocía demasiado bien.

Pude sentir como el auto se frenaba y Tom salía de este.
Sentí que me elevava y supe al instante que Tom me había cargado y me llevaba hacia alguna parte, como un bebé.
Intenté quejarme. Protestar. Podía ver su mentón y su cuello. No me miraba, solo caminaba hacia el frente. Estaba todo tan oscuro.

_ tom...._  solo conseguia decir murmuros y balbuceos _ bajame, idiota_ logré formular.

_ Aly, se una buena niña y no me hagas enojar_ ja, quien se creía? Intenté torpemente bajarme, pero no me lo permitió. Me sujeto con resistencia.

Entro a un lugar desconocido y luego de subir unas interminables escaleras, me dejó sobre una fría cama.

Lo ví girarse y sacarse su chaqueta y luego remera.
Estaba de espaldas, era mi oportunidad. Me di la vuelta para bajar por el otro lado del enorme colchon. Pero antes de que mis pies pudieran tocar el suelo, unas frías manos me rodearon la cintura.
Me atrajo hacia su abdomen, haciendo que los dos quedemos acostados en cucharita.

_ Dónde crees que vas, niña?_ dijo con una voz ronca, en mi oído.
Oírlo así, me generó un escalofrío por toda mi espalda. Me empezó a dar besitos húmedos en mi cuello.

¿Que estaba haciendo? Era mi mejor amigo.
Intenté apartarme. Nunca pensé que esto pasaría. Confieso que si eh.... imaginado... pero no.... bueno, lo que sea.

No sé si era que yo no tenía fuerza o el se había puesto más fuerte. Pero intentar alejarme era ridículo. No entendia que hacia o que pretendía hacer.

_ Tom, que? no..._ no me permitió moverme. Sus besos me producian pequeños destellos de electricidad en mi vientre.
Sus besos se volvieron más fuertes. Besaba y lamía la zona. Me removí inquieta. Si seguía de esa manera, dejaría marcas. Sin embargo no me permitia moverme.

_ t-tom... detente, por favor_ murmuré dando suspiros entrecortados. Sentí que se tensaba, ante lo dicho. Ni siquiera estaba segura si quería que pare.
El solo seguía, no le importaba nada, mientras yo me derretía en sus brazos.

  De repente se detuvo y lo oí dar un largo suspiro.

_ Lo siento...._ murmuro y sentí como me precionaba sutilmente hacia el.
Mis ojos se volvieron a llenar de lágrimas, por tercera vez en la noche.
No podía alejarme de él. No quería. Mi voluntad no me alcanzaba para irme.

Parecía que estuviera nadando contra la corriente.
Si no quería hundirme, talvez solo tenía que dejarme llevar en esas aguas turbias. Dejarme llevar a lo desconocido.

_ No quiero alejarme de ti _ Comenzó a darme pequeñas caricias en mi brazo. Se me erizo la piel. Lo noto y  sonrio sobre mi oreja_ Permíteme estar contigo. Por favor. Quiero tenerte conmigo..._

¿Por qué me decía eso? ¿Por qué me sentia de esta manera? Era... Era Tom...

_ Yo quiero... quiero tenerte... tocarte..._  Aquello produjo que todo en mi, se revolviera. Sentía como todo mi cuerpo se encedia. _ Pero no así. No haré nada estando tu, en este estado_

_Eres un idiota. Lo sabes, cierto?_ balbucee. Sonrío con picardía en mi cuello.

_ Lo sé, y aún asi, no puedes alejarte de mi_ Note al instante ese tono de superioridad.

Y luego de decir ello, se acerco a mi cara y depósito un gentil beso en mi mejilla, probando mi salada lágrima. Y murmuro:

_ Buenas noches mi princesa_  Intenté protestar, pero en verdad, estaba realmente cansada. Así que sin más, deje que el sueño y sus brazos me envolvieran.

Good girl (TOM KAULITZ)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora