Good girl (TOM KAULITZ)

memoria

Abri los ojos completamente desconcertada. Estaba en una oscuridad asfixiante. Me sentía mareada y con un horrible dolor de cabeza. Todo en mi, estaba revuelto.

Dónde carajos estaba? intenté recordar que había pasado anoche.
Solo podía recordar imágenes confusas. Las luces del antro, bailes, alcohol, música....besos. Besos? carajo ¡Tom!
No, no, no.

Podía recordar a Tom acariciandome, besando mi cuello. Acaso había...? Habíamos...? No. Imposible.

Me senté en la cama alterada. Tratando de ver dónde me encontraba. Oi la puerta abrirse ruidosamente y como la luz de aquella habitación, se encedia.

Cerré mis ojos ante aquella repentina claridad. Cuando estos se acostumbraron a la luz, pude ver a Tom, observandome de arriba a bajo con una sonrisa pícara.

Instintivamente tape mi cuerpo con las sábanas. Y al ver que no apartaba sus penetrantes ojos de los míos, mire hacia bajo avergonzada. Su mirada erizaba mi piel.

_ porfin te levantaste, princesa_ dijo él, sonriendo de lado. Volví a mirarlo enojada.

_ deja de decirme de esa manera, Tom. Sabes que no me gusta_

_ cierto_ se acerco a mi eh instintivamente retrocedi sobre las sábanas. El se dió cuenta _que pasa?_ parecía confundido, así que fui directa.

_ Tom que paso anoche? Y-yo... Tu y yo no hemos...?_ su confusion se había esfumado. Bajo la cabeza divertido. Cayó en cuenta de mi comportamiento.

_ No recuerdas nada de anoche cierto?_ Tomo como un no mi expresión _ No. No pasó nada _ Sentí un enorme alivio. Pero, que había Sido entonces lo que recordaba?

Se sentó junto a mi en la cama. Me miró con ternura. Mi corazón se hablandó un poco. No tenía razón para tratarlo mal. O si?

Su expresión volvió a una de enfado.

_Odie verte así anoche. No vas a volver a tomar._ oh. Otra vez lo mismo. Está vez decidí cortarle. No me manejaría.

_No._

_¿No?_ pareció confundido.

_ No eres nadie para prohibirme nada, Tom_ trate de sonar lo más firme que podía. Apartó su mirada. Note su mandíbula tensarse. Esto claramente le disgustaba.

_Mira niña_ Sentí que hablaría con brusquedad, pero suspiró y hablo con tranquilidad _ Yo... yo no estoy... No trato de controlarte, yo solo... ah joder._ Apretó sus dientes.

Tom era una persona muy impulsiva. En sus acciones y respeto a lo que decia. Temía hablarle en ese tono, pero no iba a permitir más de esta mierda.

_ Solo, solo quiero cuidarte ¿si?_ me miró con una expresión casi suplicante.

Suspiré un tanto cansada. Asentí.
Su cara se suavizó y volvio a tener esa estúpida y perfecta sonrisa.

_ quieres desayunar?_ pregunto levantandose. Asentí e intente repetir su acción, pero al momento de querer pararme, sentí un gran mareo. Mis piernas fallaron. Tom se apresuró y me sostuvo justo antes de tocar el suelo.

_ ey, ey, ey. Estás bien?_ Me dejó sobre la cama, y puso la parte trasera de su mano en mi frente _ Dios. Estás volando de fiebre_

Mis ojos se cerraban lentamente. Estaba cansada y mareada. Lo oí levantarse y salir del cuarto. Unos segundos más tarde volvió con un paño mojado y lo extendió sobre mi cabeza.

A penas sentí el frío contacto, trate de sacarmelo pero Tom sostuvo mis manos.

_Ay Tom! está friooo_ Al ver mi expresión exesperada se hecho a reír, divertido _ Sueltame y saca esa maldita cosa de mi_ Le exiji pero hizo de oídos sordos.

_ Deja de moverte. Eres una inquieta_ sujeto mis muñecas con firmeza _ Mire su agarre y luego a él. Me sonroje ligeramente. Lo notó y sonrío _ Te quieres poner bien o no?_ Agotada deje de moverte. Me soltó más manos _ Descansa. Yo iré abajo.._ Intento de levantarse pero antes de que pusiera completar la acción, tome de su brazo.

Ni siquiera estaba consiente de que estaba haciendo. Solo lo hacía.

_ no..._ se volvio a mi confundido _ quedate conmigo..._ Balbucee. Note sus pupilas dilatarse.

_ Estás delirando Aly. Luego te arrepentirás y yo...._ se callo a si mismo. Volvió a verme, pero su expresión no era de ternura como hace un rato. Emanaba cierta lujuria y deseo _ Ya me volverás a decir eso. Te lo aseguro_ Dijo en tono seco.

Lo oí levantarse. Apagó la luz y salió de la habitación.
Sentí un vacío inexplicable en mi pecho. Que me pasaba? Por qué le había dicho eso?
Me quedé quieta mirando al techo. En la oscuridad.

Sentí ganas de llorar y no sabía muy bien la razón.
Cuando eso me pasaba, solo me limitaba a reprimir el llanto. Pero está vez deje que mis emociones me ganarán.

Una ola de recuerdos me inundaron la memoria. A Tom lo conocía desde que era tan solo niña. Nuestras madres eran muy unidas desde su adolescencia. La mía, había quedado embarazada unos meses después del nacimiento de Tom.
Nos criaron juntos toda nuestra infancia, junto a su gemelo. Bill y yo nos parecíamos muchísimo y teníamos gustos muy similares. Veíamos películas juntos y hacíamos pequeñas escapadas a campos o al bosque, cerca del pueblo, en aquel entonces. En cambio Tom siempre solía meterse en problemas y en cientos de peleas. Usualmente, siempre estaba en la oficina del director.

Recuerdo las muchas veces que Tom nos ah defendiendo, de los matones de la escuela. Era una especie de hermano mayor para Bill y yo.
También, la vez que decidieron hacer una banda. Pasábamos tantas tardes en el garage de su casa practicando y riendo...

La melancolía me llega de golpe. Sonrío como idiota, pensando que alguna vez en mi pubertad estuve tan jodidamente enamorada de el. Era el típico chico malote, que no le importaba nada. Me traía loca.

Lentamente mis ojos se fueron cerrando. Caí dormida. Otra vez, en su cama.