☆ ¿Lograran descubrir qué fue lo que le sucedió en esa lluvia de estrellas? ☆
Jake es un estudiante de preparatoria que no cree en los mitos de su pueblo. Pero luego de notar sentimientos extraños hacia Heeseung, el chico más molesto a su parecer, e...
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☆UN EVENTO MÁGICO☆
Lunes 13 de marzo
La gente solía decir que el número 13 significaba mala suerte. Jake nunca creyó que una babosada como esa fuera real, pero ahora se lo cuestionaba seriamente. Aunque el día no fue tan malo. En resumen, luego de que se le partiera el corazón en miles de trocitos y se fuera corriendo como un dramático mientras lloraba bajo la lluvia —sí, en retrospectiva sonaba bastante ridículo —, Heeseung lo condujo hasta otro salón para protegerse de la lluvia y explicarle que fue lo que había sucedido.
Resulta, que la linda chica que lo besó, de nombre Emily, era una alumna de tercer grado de la que Heeseung llegó a sentirse atraído unos días antes del murasakino, algo que pasó completamente desapercibido por Jake y no hace falta mencionar que su corazón volvió a estrujarse al escucharlo. Pero volviendo al caso, Heeseung quiso hablar con ella, aprovechando que tenían un proyecto de música juntos, para ver cómo reaccionaba luego de la pócima de la vieja curandera. Para sorpresa de ambos, Emily terminó deduciendo de lo que se trataba y accedió con mucha facilidad ante la curiosidad de Heeseung, quien no tenía pensado decirle absolutamente nada. Al final, Emily decidió besarlo a propósito cuando lo vio llegar al salón, para que sus instintos reaccionaran por su propia cuenta. Un movimiento arriesgado, pero bastante acertado, pues Heeseung confirmó que no sintió nada luego del beso y no dudó ni un segundo en salir corriendo detrás de Jake, ¿la razón? Sorprendentemente, Jake no lograba deducir la evidente señal que significaba aquello. Y terminó diciendo una babosada como:
— No hacía falta que te molestaras en explicarme nada, después de todo no estamos en una relación ni nada... —tenía una expresión tan triste que parecía un perro quejándose porque no encontraba su juguete favorito.
— Eso pronto cambiará —le contestó Heeseung. Y de nuevo, el cabezota de Jake no supo interpretar esa obvia indirecta. — ¿Estás ocupado mañana después de clases? —Jake negó con la cabeza, aún cabizbajo. Cosa que pareció divertir a Heeseung, pues le lanzó otra de esas miradas traviesas acompañadas de una leve sonrisa. — Perfecto —fue lo último que dijo antes de despedirse. Jake estuvo toda la tarde pensando, comiendo papas, sin saber cómo sentirse al descubrir la verdadera razón detrás de ese beso que le alertó tanto.
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Martes 14 de marzo
—...pero ¡¿tú eres idiota?! —gritó Jungwon exasperado ante el relato de su mayor. — ¡Es más que obvio! —
— No entiendo —dijo Jake enjugándose los ojos. Genuinamente, no era capaz de interpretar las indirectas.
— Ya déjalo, Wonnie, ¿no ves que está enamorado? Es normal que se apendeje poquito —defendió Sunoo. Aunque Jake lo miró con aire traicionero y el menor soltó una carcajada.
