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Jennie empujó a Mino por el hombro por tercera vez consecutiva en esa noche

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Jennie empujó a Mino por el hombro por tercera vez consecutiva en esa noche.

Él se tiró cayendo de espaldas a la cama, quizás harto de rogar a Jennie por un poco de atención, sus dientes fuertemente apretados. El enojo dominando cada facción del atractivo rostro de Mino.

- ¿Por qué no me dejas tocarte? - Mino preguntó a Jennie.

Jennie no respondió, ella siguió arreglándose en su vestido, mirándose en el espejo, tratando de aclarar sus pensamientos.

Jennie se observó detenidamente, su prolijo e impecable vestido negro era hermoso. El diseñador hizo un perfecto trabajo con sus objetivos de la prenda, haciendo lucir su cremosa pálida piel. Su delicioso perfume flotaba alrededor, su castaño cabello cayendo sobre su frente, brillante y lacio. Como le gustaba que se viera.

- Porque no tengo ganas. Fin de la historia - dijo.

Han pasado dos meses desde su último encuentro con Lisa, en su departamento. Desde su discusión en el pasillo no le habló, llamó o prestó demasiada atención. Cada vez que se encontraban en su casa sólo se ignoraban y seguían en lo suyo.

Jennie subía a su cuarto, se encerraba y esperaba pacientemente a que Lisa se largara. Eso se volvió monótono.

Quizá porque no podía soportar saber que Lisa ya no le miraba como antes. Esa adoración leal ya no estaba en sus ojos.

Ahora sólo quedaba la incomodidad y el espectro de la relación que alguna vez tuvieron.

Odiaba tratarla como a una desconocida.

Odiaba tenerla lejos.

Odiaba que ya no le sonriera.

Odiaba el hecho de que Lisa ya no la quería.

Jennie se odiaba a sí misma.

Jennie estaba volviéndose loca, todos y cada uno de los días transcurridos, no lograba pensar en otra cosa que no sea Lalisa Manoban

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Jennie estaba volviéndose loca, todos y cada uno de los días transcurridos, no lograba pensar en otra cosa que no sea Lalisa Manoban.

Lisa atormentaba su mente y pensamientos.

La amiga de papi | 𝗝𝗟Donde viven las historias. Descúbrelo ahora