Terrible Omega ·•Soramafu•·

·•30•·

Sólo una puerta se interpone es el magnetismo de estos sentimientos...

--ya salgo...--abracé mis piernas y respiré suavemente.

--Mafu... Me preocupas, ¿enserio estás bien?--su voz... Ah, me pregunto si siempre tuvo ese efecto en mi, o si no aceptarlo o entenderlo era una barrera que evitaba los efectos que él tenía en mi.

Me levanté y abrí la puerta velozmente.

Se siente pesado... ¿Veo este sentimiento como una carga?... No quería que pasara y pasó, ah...

--¡eres-!--no quise continuar, solo lo abracé fuertemente, hundiendo mi rostro en su pecho, cerrando los ojos y...

Con confusión correspondió mi abrazo, su mano detras de mi nuca... Él era muy cálido.

--¿soy?--preguntó y apreté mis manos que agarraban su ropa con un poco de fuerza.

Eres todo lo que deseo que se quede a mi lado...

--me siento cansado...--froté mi rostro suavemente en su pecho y se rió levemente.

¿Acaso yo soy como un niño caprichoso ahora mismo? Yo... Me desconozco.

--¿vamos a dormir?--siquiera pude contestar, me tomó entre sus brazos y me llevó hasta su cuarto.

No puedo moverme, no puedo negarme, solo aferrarme a ti... No es justo.

Suspiré amando resignadamente a este tonto alfa.

Sentí cuando mi espalda fué apoyada suavemente sobre la cama, su mirada era... Tan profunda hacia la mía que podía notar como parecía perforar mi alma.

Soraru-san... ¿En verdad me amas mucho? Hasta que no esté seguro estos sentimientos seguirán atrapados...

--si quieres puedo irme--me dijo con una sonrisa.

Yo... Lo haces a propósito, ¿cierto?

No dije nada, entonces se dió la vuelta para irse, pero antes de que avanzara tire de su ropa.

--no te vayas...--lentamente volteó a verme con esa mirada pícara--eres un idiota--le dije y se tiró encima de mi, sin llegar a aplastarme.

--repitelo, ¡y te aplastaré!--dijo riendo.

--¡bajate! ¡No quiero morir aplastado!--pataleé y Soraru-san no dejaba de reirse.

Ah... Idiota.

--¡ya!--

--nop, no lo haré hasta que me des algo a cambio--cuando dijo eso lo miré de muy mala manera, es muy tramposo...

--¡ugh! ¿Que quieres?--pregunté de mala manera.

--un beso, aunque sea corto...--su mirada descendió a mis labios y mi corazón latió desesperado.

--a-ah--me le quedé viendo.

¿Deberia aceptar? Hasta que no sepa si me amas mucho no sé si seguir dandote mi corazón... Cada vez más...

--¿mmh?--esos ojos me envuelven lentamente y...

Sigo creyendo que deberia decir que no, pero esos ojos me hacen decir que...

--s-si--aún me da vergüenza decirle que si...

Cerré los ojos con fuerza.

--no...--sentí sus labios sobre los mios sutilmente, apenas rozaban--no cierres los ojos, mirame--mi corazón latió fuerte.