El reflejo de nuestro amor

CAPITULO 2

  "EL MALOTE PROSTITUTO"

Ya ha pasado un mes desde que vivo aquí trabajo en una cafetería del centro y después de mis clases y en las noches doy lecciones de baile a un grupo de adolescentes. En este mismo momento voy camino a la cafetería donde trabajo, a lo lejos veo un chico un estilo impresionante, pantalón gris pulóver  banco y una chaqueta del mismo color de pantalón, cabello rubio con unas luces en rosa dios parece el dios de la moda. Paso por su lado y me es imposible dejar de mirarlo él me sonríe y yo continuo mi camino.
Solo falta 30 minutos para terminar mi turno y entra el chico rubio con tres chicos más, dios que papasotes me les acerco
-Buenas tardes bienvenidos  a tus sueños que desean ordenar- todos tenían la vista en mi excepto uno como no parecía el malote del grupo ropa negra chaqueta de cuero- van a pedir o no se deciden aun 
-Yo quiero un batido de helado de chocolate  blanco y una rebanada de pastel del mismo sabor- habla el rubio- por cierto mi nombre es Apolo- le sonrío y los demás continúan pidiendo y lo falta el malote con falta de personalidad.
-Quiero lo mismo de apolo- me mira a los ojos y su azul electrizante hace que mis pies tiemble- que espera ya puedes marcharte- su falta de educación me molesta y no me puedo aguantar.
-Ya sabía yo que esta no iba hacer la excepción- hago una mueca y me giro para irme hasta que escucho su voz.
-De que mierda hablas- su tonito me está irritando y él no sabe cuánto.
-Sabes, en esta vida no todo es perfecto pero bueno, en todo grupo que se respete está el serio, el prostituto, el mujeriego, el gay y por supuesto el malote delincuente, de poca estabilidad mental y el del corazón destrozado, no pues de ahí,-pongo la sonrisa más hipócrita que tengo - tú eres el peor, estúpido- todos sus amigos se quedan estáticos esperando su reacción  y de la nada suelta una gran carcajada- Aunque creo que me confundí aquí el malote y prostituto son la misma persona- él se queda atónico y yo con mi sonrisa triunfante me voy a realizar sus pedidos.
Llego a la barra hago el pedido y los miro de reojo y veo como una rubia despampanante con más cirugía que una kardashian  se le tira en los brazos al intento de malote él le sonríe y la besa, yo giro los ojos tomo el pedido que ya estaba listo y lo llevo a la mesa dejó el pedido, regreso a la barra le doy mi libreta a la otra camarera y voy a cambiarme.
Hoy es noche de chicas, si tengo tres locas amigas ella son más fiestera que yo así  que hoy toca bar. Me doy una dicha salgo elijo in vestido blanco a medio muslo con pelitos en la zona de los pechos, unas botas del mismo color dos dedos por encima de las rodillas y mi pelo o deje tal cual. Me llega el mensaje que las chicas ya están abajo salgo del apartamento y veo frente a mi al malote prostituto.