XI

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Baji se paseaba. Eso es lo que hacía cuando estaba nervioso. Se paseaba y se mordía la uña del pulgar y esperaba que un héroe viniera y arreglara todo lo que estaba mal en su mundo.

Nadie acudió.

Baji usualmente recurría a Hanma para hacer que su mundo estuviera correcto, pero su hermano ya estaba allí, y la mirada sombría en su rostro no estaba tranquilizando a Baji de que conseguiría a su gato de vuelta en cualquier momento pronto.

El mundo de Baji había sido puesto al revés, hace cuatro días, y no parecía que se asentaría en un futuro próximo. Baji presionó sus manos contra su cara cuando las lágrimas brotaron de sus ojos y amenazaron con extenderse por sus mejillas.

Quería a Fuyu de vuelta. Incluso lo querría como un gato. Por supuesto, preferiría que Fuyu volviera como humano y permaneciera humano, pero él tomaría a Fuyu como felino peludo si eso significaba que tuviera a su amado gato de nuevo en su vida, sano y salvo.

-Vamos a encontrarlo, Baji.

Baji dejó caer la mano y se volvió para mirar a su hermano.

- No puedes prometer eso, no esta vez. No tenemos ni idea de quién tiene a Fuyu.

Los labios de Hanma se apretaron en una enojada línea delgada, sus manos se apretaron alrededor del teléfono en su mano. -Vamos a encontrarlo, Baji. Me niego a conformarme con menos.

Baji deseaba tener la confianza de su hermano.

Sólo que no la tenía.

Algunos desconocidos habían venido hasta su puerta y tomado la cosa más importante en el mundo para Baji. Ni siquiera sentía como que su casa fuera segura ya. Sentía frío sólo de pensar en lo que podría ocurrir si esos hombres regresaban.

-¿Por qué crees que querían a Fuyu?

Hanma se acercó al escritorio y tomó un pase de visitante que había llamado la atención de Baji antes. Había estado en el montón de basura que recogió en el exterior. El pase de visitante había sido emitido por la seguridad en las instalaciones de GeoCore Pharmaceuticals.

Había sido emitido por el Dr. Craig.

-Creo que había algo más en esa fórmula que querían que examinaras de lo que estaban diciendo. -Hanma sacudió el pase de visitante frente a Baji-. Apuesto a que sabían exactamente lo que estaba allí dentro y Fuyu es su prueba.

El corazón de Baji pareció congelarse en su pecho. -¿Pero prueba de qué?

-La prueba de que sus pequeños nanorobots funcionan.

Baji sabía que sus emociones abrumadoras estaban haciendo estragos en sus habilidades de razonamiento en este momento, pero estaba totalmente perdido.

-Fuyu ya se ha transformado, -dijo-. ¿Cómo puede ser la prueba?

Baji se mordió el labio inferior mientras se alejaba de Hanma cuando el hombre sólo se encogió de hombros.

Hanma no parecía tener ninguna respuesta más que él.

Baji comenzó a caminar de nuevo, mientras imaginaba cada escenario horrible una y otra vez en su cabeza.

Todos y cada uno de ellos terminaban con Fuyu saliendo herido de alguna manera.

Baji no podía encontrar una manera de salir de esta situación. Si la fórmula era lo que querían Craig y Bodle, Baji gustosamente se las entregaría tan pronto como le devolvieran a su gato. Su único problema con eso era que no sabía dónde entregarla. Los dos científicos parecían haber desaparecido de la faz de la tierra.

𝐀𝐪𝐮í 𝐅𝐮𝐲𝐮 𝐅𝐮𝐲𝐮 ;  𝐁𝐚𝐣𝐢𝐟𝐮𝐲𝐮 - 𝐂𝐚𝐦𝐛𝐢𝐚𝐟𝐨𝐫𝐦𝐚𝐬Donde viven las historias. Descúbrelo ahora