Dejaré De Ser Príncipe¹ || Banginho-EDITANDO

❦ 29 ❦

Capítulo 29: Saludos Tardíos

Minho miró los ojos verdes de Sunhwa.

"¿Estas segura acerca de esto?"

"Sí, si tu oponente es ese trío feo, tienes que destacar"

"..." Sunhwa se sintió muy apenada.

"Es cierto que a Jisung le falta mucho, pero no es un mal chico"

"Lo sé, así que no quiero que eso suceda". No es que tuviera la intención de cerrarse, pero ahora el corazón de Minho estaba lleno de felicidad.
Incluso si no encontraba otro amor, estaba feliz de ver el crecimiento de Jeongin en los brazos de su familia. "Y no quiero ser alguien que empañe la reputación de Lord Jisung".

Jisung era el hijo mayor de la persona más influyente del imperio. Su encantadora
personalidad era el mejor candidato para un futuro esposo en el reino. Así que se supone que no debe asociarse con un príncipe divorciado.

"No, príncipe. Es Jisung quien tiene el honor".

"No. Encuentra otro noble para Sir Jisung".

"¿Incluso si a mi hermano le gusta el príncipe?"

Minho se rió de las tonterías.

"Jisung tiene un corazón por el príncipe.
Cuando supo que ibas a ser Príncipe Consorte, lloró toda la noche y sus ojos se hincharon. Es lo mismo ahora. Soy su hermana, así que puedo decirlo por su rostro".

"De ninguna manera."

"¿Por qué no príncipe? Piénsalo. Cuando los Wyverns atacaron, Jisung me dejó y corrió hacia ti. En esa peligrosa situación, protegió tu espalda. Lo primero que quería proteger en tiempos de peligro significaba que tú eras la persona más preciada".

La declaración no se pudo negar. En ese momento, la seguridad de Jeongin era más importante para Minho excepto su propia vida. Su cuerpo se movió primero antes de que pudiera siquiera pensar.

"Probablemente sea porque es un caballero".

Minho intentó cambiar el tema de la incómoda conversación. Jisung tenía mucho más que su noble condición de duque. Era conocido por su actitud amable y afectuosa, por lo que era un hombre que no tenía ninguna posibilidad de ser un marido terrible.

"Tengo que criar a Jeongin. Se trata de proteger el futuro de nuestro reino y, lo más importante, estoy feliz".

"Por supuesto, quién te va a detener..." dijo
Sunhwa. Ella estaba sonriendo alegremente. "Es el mejor lujo poder jugar con el príncipe en el palacio real durante mucho tiempo".

"¿De Verdad? En realidad, el palacio real no tiene nada de especial en estos días, porque Jeongin es el centro de atención".

"No se preocupe. Sé jugar".

Los ojos verdes de Sunhwa se iluminaron.
Afortunadamente, Minho era un amigo paciente. Si fuera Jisung, cuando viera a su hermana, querría agarrar su nuca de nuevo.

"Todavía tenemos mucha libertad para disfrutar".

"Sunhwa, eres una buena amiga".

"Tú también, príncipe".

La amorosa hora del té finalmente había pasado. Minho se rió y charló con Sunhwa como si hubiera regresado a su adolescencia.
Jugaban juntos e incluso combinaban las vestimentas del otro.