Peter Parker era un adolescente cualquiera, con problemas de cualquier adolescente... hasta que le pica una araña y todo cambia...
Acompáñame a ver esta historia de conflictos, villanos, héroes y sobre todo... amor.
Peter: Gwen, saca mí nuevo traje, está en el armario de por allí.
Gwen: ¿Este rojo y azul?
Peter: Si.
Peter se saca su traje clásico rojo y azul y se coloca su nuevo traje antielectro.
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Gwen: Ese traje te queda bien...
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Peter: Gracias Gwendy.
Gwen: ...Aunque debo admitir que ningún traje supera al clásico rojo y azul.
Peter: Es literalmente el mejor traje de todos.
Gwen: Ahora sí, será mejor que nos vayamos. Con cada segundo que pasa Electro se hace cada vez más poderoso.
Peter: Claro, sujetate que ya nos vamos.
Gwen: Ok Pet.
Ambos empiezan a balancearse por las oscuras calles de New York.
Gwen se encontraba sorprendentemente tranquila, como si viviera algo así a diario.
En cambio Peter estaba algo nervioso. No le gustaba mucho la idea de que Gwen lo acompañará. Es verdad que ella lo ayudaría mucho ya que es un villano demasiado poderoso para él, pero a la vez no quería arriesgarse a que le pase algo malo a Gwen...
Al llegar a la central eléctrica Peter deja a Gwen en un rincón.
Peter: Escúchame con mucha atención Gwen. En la cabina de mando hay una palanca junto a varios interruptores que anula toda la electricidad del lugar. Necesito que llegues y bajes esa palanca para evitar que Electro siga absorbiendo energía. Tal vez así lo detengamos.
Gwen: De acuerdo (Dice asintiendo con la cabeza).
Peter: Yo haré el trabajo sucio...
Dicho esto Gwen se dirige a la cabina de mando para hacer su parte del trabajo, mientras que Peter se sube a la torre del reloj para buscar a Electro, quien lo estaba esperando a los pies de la misma.
