Detrás de la sonrisa triste

Capítulo 5: Lejos de una historia de amor

Toda esta historia, lejos de ser un cuento de amor convencional, se convierte en un testimonio de los amores no correspondidos. Viktor, se encontraba sentado junto a Lucy en la sala, la incomodidad se cierne sobre ellos como una densa niebla. Las palabras no dichas flotan en el aire, cargadas de decepción y confusión.

Viktor, sumido en un mar de pensamientos revoltosos, siente que su mundo se desmorona. Cada momento compartido con Lucy, cada risa y cada gesto cariñoso, ahora se desdibujan ante sus ojos como ilusiones fugaces. Duda de sí mismo, de sus acciones y de cómo ha interpretado las señales que creía haber visto.

La frustración se apodera de él, mezclándose con la tristeza y la humillación. Se pregunta una y otra vez ¿por qué Lucy no pudo corresponder a sus sentimientos?, ¿por qué no pudo ver en él lo que él veía en ella? Las preguntas se amontonaban en su mente, alimentando su rabia y su resentimiento.

En medio de esa marea de emociones, se enfrenta a la realidad de que sus ilusiones se han desvanecido. El dolor de la decepción lo consume, y se siente atrapado en un laberinto de preguntas sin respuestas claras.

Viktor, incapaz de contener su enojo y resentimiento, deja escapar sus palabras con un tono agresivo, cuestionando por qué Lucy no le había dejado claro desde el principio que solo lo veía como amigo.

- ¿Por qué nunca me dejaste en claro esto?, ¿hice algo mal? - Preguntaba Viktor, aferrándose a la idea de que Lucy pudiera cambiar de opinión.

El dolor se refleja en los ojos de Lucy mientras las lágrimas siguen inundando su rostro. Se siente abrumada, sin encontrar las palabras adecuadas para responder. Por más que desee corresponder a los sentimientos de Viktor, sabe en lo más profundo de su ser que su corazón no puede cambiar.

- No sé cómo responderte, siento que no puedo hacer nada bien... - Decía Lucy, mientras se secaba las lágrimas.

La conversación se torna más intensa, los reproches llenan el espacio entre ellos. La tensión se vuelve insoportable tanto para Lucy como para Viktor. En un arranque de frustración, Viktor toma la decisión de marcharse.

- Esto nunca pudo funcionar, no puedo soportar esto - Decía, mientras se dirigía hacia la puerta lentamente con la esperanza de que Lucy lo detuviera, pero ella no dijo nada, se quedó observando desde el sofá como se iba.

Lucy quedó devastada, sintiéndose culpable por todo lo que ha sucedido. La tristeza la abraza con fuerza, envolviéndola en una nube de autodesprecio. Se culpaba por la muerte de su madre y la de su hermano, por los problemas de alcohol con su padre y de no ayudarlo con su cáncer, y ahora, por la ruptura de su amistad con Viktor.

Viktor abrió la puerta, volteó a ver a Lucy, quien lo miraba con una sonrisa triste, como si quisiera transmitirle todo su arrepentimiento y dolor en un gesto. Sus ojos están llenos de lágrimas mientras murmura con voz entrecortada:

- Lo siento...

Viktor se aleja entre lágrimas sin poder decirle nada, dejando a Lucy en el silencio abrumador de la despedida. Ambos se enfrentan a la realidad de que su relación ha sufrido un quiebre irreversible. La tristeza y el pesar se entrelazan, dejando un rastro de dolor en sus corazones.

Viktor, mientras camina hacia la soledad de su dolor, siente como los pensamientos tristes lo envuelven, como en una tormenta emocional. Se pregunta una y otra vez por qué las cosas no pudieron ser diferentes, por qué el destino les jugó esta cruel partida. Siente una mezcla de enojo, tristeza y humillación, preguntándose si alguna vez podrá superar el rechazo de la chica de sus sueños.

El taxi lo recoge en la calle y lo lleva a casa, pero incluso en el trayecto, su mente sigue llena de pesar y melancolía. Contempla a través de la ventana las luces de la ciudad de París que parecen difuminarse ante su mirada nublada por las lágrimas. Se siente vacío y perdido, incapaz de encontrar consuelo en medio de la confusión que embarga su corazón.