Extra 10: Hasta la raíz [Parte II]

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G. O. A. T

"Cuando te me acercas
Se acelera mi motor
Me da fiebre, me hago fuego
Y me vuelvo a consumir"
Luna - Zoe


Extra 10. Hasta la raíz [Parte II]

Para Lionel Andrés Messi Cuccitini la vida como la de todos estaba llena de primeras veces.

La primera vez que tocó un balón, la primera vez que piso una cancha, su primera vez en el Barcelona, su primer viaje en avión, su primera noche durmiendo solo, su primera comida ajena a la de su madre, sus primeros miedos, sus primeras alegrías, su primer gol, su primera titularidad, su primer premio...

Haciendo memoria todas sus primeras veces estaban envueltas en alegrías y tristezas.

Mientras tomaba la mano de Guille entre la suya de camino a la recepción, se dio cuenta que Guille estuvo en muchas de sus primeras veces.

Fue su primer mejor amigo, el primero que se preocupo de que comiera bien, el primero en llevarlo de viaje, el primero en buscarlo a la salida, el primero en asustarlo de muerte, el primero que lo abrazo al llorar, el primero con el que sintió celos, el primero con el que tuvo miedo.

No fue su primer beso, pero fue el primero con el que sintió que podía morir de una combustión espontánea al probar sus labios.

Fue el primero en quitarle sus inseguridades.

Fue su primera vez.

Fue su primer amor.

Es el único que tiene.

Con Guille ha tenido tantas primeras veces que ahora que están oficialmente casados se daba cuenta que ahora podía empezar a enumerar otro tipo de primeras veces.

Su primer beso de esposos.

Su primer te amo sincero.

Su primer y único gran amor.

Guille es lo que siempre soñó cuando creyó no estar buscando a nadie y ahora...

Ahora no imaginaba una vida sin él.

Apretó un poco su mano admirándolo, Guille miraba por la ventana las luces de la Ciudad de México con rumbo hacia el hotel donde se llevaría la recepción.

Para Lio esto era un sueño, uno del qué nunca quería despertar.

Memo sintió el agarre y volteo con una sonrisa encantadora, la comisura de sus labios se alzaba un poquito de las esquinas y sus ojos que parecían llorar ahora brillaban llenos de alegría.

-¿Pasa algo?

Lio negó sin dejar de verlo.

¿Cómo podía pasar algo cuando todo era una burbuja de felicidad en la que estaban envueltos?

Para Lio, Guille era su primera vez en todo y ahora sería para siempre.

No supo que decir, solo dejó que su mano siguiera sostenida por la de Guille en donde su alianza brillaba.

Guille entendió lo que quería expresar sin decir nada, así que solo alzó su mano y le besó los nudillos.

Si para Lío, Guille era todas sus primeras veces, Lio no se quedaba atrás.

Ambos habían pasado por tantas cosas, que ahora estar así, juntos como siempre debió ser parecía un sueño inalcanzable.

Uno que acariciaban con sus manos.

-Te amo Lio.

Para Guille también Lio era muchas de sus primeras veces.

Podía enumerarlas todas pero se le iría la noche y no aprovecharía esa gran fiesta que tenían planeada para decirle al mundo...

G. O. A. TDonde viven las historias. Descúbrelo ahora