Confía y Muere

Capítulo 20

Yo sé que fue por mí que acabó esta historia
Y queda en manos de mi memoria
Que por las noches te pueda ver
¿Por qué nunca admití estar enamorado?
Siempre lo supe y no dije nada
Mi corazón se quiso esconder

Dirá la gente que yo estoy loco
Si yo estoy loco es porque andas en mi cabeza
Quise obligarme a olvidar tu boca
Y ahora mi boca dirá que si tú regresas

Vas a quedarte
Porque te juro que esta vez voy a cuidarte
A nuestra historia le hace falta una segunda parte
Aunque nos digan que eso nunca sale bien
Vas a quedarte
Yo haré de todo por volver a enamorarte
Yo tengo miedo porque nunca pude reemplazarte
Y si lo intentas te prometo que esta vez
Vas a quedarte...

Jungkook había optado por llevar a Jimin dentro ya que no parecía que fuera a dejar de llorar fácilmente. Se sentía tan bien estar con él otra vez, sentir su calor, incluso sus sollozos.

- ¿Quieres dejar de llorar y prestarme atención? - Divertido secando las lagrimitas del menor - Lo siento pequeño, lo siento tanto, siento todo lo malo que te he hecho, por favor ahora perdóname

- J-Jungkookie, juro que yo no quería, tú... Yo sentía tanto rencor y sólo... Todo pasó tan rápido. Yo no quería matarte lo juro - Realmente Jimin seguía pensando que esto era una alucinación, o un sueño, o que se había caído de alguna parte y ahora estaba muerto y convertido en fantasma al igual que Jungkook

- No, sh sh sh, no tienes que disculparte, entiendo perfectamente, no tienes que disculparte por nada, te amo, y hagas lo que hagas te voy a amar. No importa si trataste de matarme, yo también... Te hice cosas horribles... Pero... Ahora estamos a mano ¿No? - com una sonrisa leve - Deberíamos... Perdonarnos... Y... Solo estar juntos. Jimin - Tomó las manitos del menor llamando su atención - ¿Tú me quieres...? ¿Siquiera un poco? - Entre ansioso y temeroso por la respuesta

- J-Jungkook-ah - Entre sollozos mirándole a los ojos - Yo te amo Jungkookie - Un pequeño puchero se formó en sus labios - Te odiaba mucho, pero nunca he podido dejar de amarte - Se confesaba sin noción de la realidad aún

Jungkook sonrió ampliamente sin poder contenerse a besar los labios del pelirrosa con pasión haciéndole despertar

- E-en verdad eres tú y no estoy soñando ¿cierto? Tú... Cómo saliste con vida?

- Ara... - Sonriendo leve

- Esa perra - frunciendo el ceño

- Me salvó de ti - Besando sus labios otra vez para que se calmara - Jimin-shi... Entonces... Tú y yo... ¿Todavía tenemos oportunidad... Para intentarlo... Una vez más...? - Algo triste

- Todavía... Tú... Quieres estar conmigo después de todo lo que te hice?

- Yo también podría preguntar lo mismo - Sonrió leve el pelinegro - Yo te amo más que a nada y para mi eso es suficiente... Tú decides...

Jimin sonrió con una lagrimita cayendo por su rostro

- Yo también te amo, y juro que esta vez... Yo voy a hacerlo bien... - Feliz, se abrazó con fuerza al pelinegro dejándolo sin aliento

- Te amo - Besó al menor una y otra vez hasta que no quedó milimetro de su rostro sin ser besado

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- ¿Seguro que deberíamos hacerlo?

- Tengo miedo pero sí... Deberíamos hacerlo ahora juntos - Lindo

- Esta bien... Hagámoslo entonces

Tomando aliento ambos, tomados de las manos

- ¡Espera no! Así no... Cargame... - Dijo el menor con inseguridad abriendo sus brazitos para Jungkook todo chiquito

- Esta bien - Sonriendo divertido por el temor del menor - Vamos!

Lo cargó con una sonrisa y sintiendo la adrenalina recorrer sus venas. Y acto seguido dio un salto con Jimin encima abrazandolo tan fuerte que parecía que quería romper sus huesos otra vez. Dejando que la gravedad hiciera su trabajo, sintiéndose en el aire por unos segundos, solo ellos dos y nada más. Cayeron al agua luego de ese chute de adrenalina y salieron a la superficie con la emoción corriendo por sus venas aún

- ¿Estas bien? - Divertido preguntó el pelinegro viendo al menor asentir

El lugar era hermoso, Jungkook llevó a Jimin a la orilla, ya que este no sabía nadar demasiado bien, y lo sentó en un pequeño muelle que había quedando entre sus piernas con sus manos apoyadas en los lindos muslos del menor

- Te ves muy sexy mojado - Dijo Jimin de forma tierna acariciando la mejilla del pelinegro con este acurrucandose a la caricia casi al ronronear como un gatito

- Tú te ves sexy en todo momento

El mayor se elevó apoyando sus manos a cada lado de las piernas de Jimin, hasta quedar a la altura de la boca de este

- Mojado, seco, arreglado, acabado de despertar... eres... hermoso en todo momento y situación... - Susurraba cerca de sus labios

Jimin se atrevió a rodear con sus manos la cintura del pelinegro, correspondiendo al acercamiento como permiso

- ¿Soy hermoso? - Susurró Jimin viéndole con timidez

- Más que eso... Eres mío...

Por fin la distancia entre sus labios se eliminó formando un delicado y dulce beso, lleno de genuino cariño.

Jungkook se separó con suavidad no queriendo ser apresurado, y sonrió complacido dejando sus manos descansar acostando su cabeza en los muslos del menor con la mitad de su cuerpo aún en el agua

- Mi pequeño Adonis - Vio la pequeña cicatriz en el muslo de Jimin y se acercó a besar esta con ternura

Jimin sentía maripositas revolotear en su interior, y no podía más que sonreír enternecido sintiéndose completo, y jugar enredando sus deditos en los cabellos húmedos de su amor de la infancia

Vas a quedarte... Y te prometo que esta vez voy a cuidarte...

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Habían pasado unas semanas, habían tratado de ir moldeando su relación de una manera que no fuera demasiado tóxica, que fuera linda, como una relación normal. Habían retomado su amor en donde lo dejaron hace una década, con juegos, risas y genuinamente enamorados los dos.

Pero como dicen por ahí, la felicidad no dura mucho...

Jimin llegaba de su trabajo en la tarde, y acercandose a su casa se dio cuenta de que estaba rodeada de policías

- ¿Que carajos? - Murmuró para sí mismo acercándose

¿Que carajos hiciste Jeon Jungkook?