Destinado a amarte~KookV

09

Nayeon se debatió entre decirle la verdad a su hijo o no. Estaba a punto de hablar pero el celular del menor sonó.

-Ahora regreso, debe ser papá.- se dirigió a su habitación a atender la llamada.

Luego de unos minutos el azabache bajo

- Lo siento mamá, era papá. Habló para saber cómo estaba y sobre como van las cosas en el trabajo.– dijo el alfa, ya había cambiado su traje por una de sus pijamas color negra.–¿Qué querías decirme?

- No-no es nada, cariño.

Nayeon lo pensó mejor y definitivamente no era su asunto informarle pues era un tema privado del omega y debía respetarlo.

Solo esperaba que su hijo no se enojara después por no decirle nada.

- Está bien, mamá.- Le dió un abrazo y un beso en la frente para después dirigirse a la cocina por un vaso de agua.

[...]

Suni le había comentado sobre la llegada de la nueva vicepresidenta, dijo que era una chica omega, hija de un amigo cercano. Le aseguró que se llevarían muy bien ya que tenían muchas cosas en común. Su carácter se podía deducir a una persona muy seria y calculadora además de que tuvo notas muy sobresalientes sin la ayuda de la posición económica de su familia. Una versión femenina de él mismo. Esperaba que fuera eficiente también.

Aún sin saber con exactitud porque una chica como ella quiso ocupar el puesto de vicepresidenta en comparación a la de Ceo que tenía garantizada al ser hija única, Jungkook ya sospechaba la razón por la que estaba ahí.

La chica entró a su oficina, vestía ropa de marca, si no sé equivocaba era de la última temporada. Pensó en lo bien que se vería su Tae en ella, definitivamente tenía que llevarlo de compras.

Los cabellos de la omega parecían fideos por los lacios que estaban y al igual que sus ojos eran negros como el carbón y su piel demasiado pálida para su gusto, comparándola con una hoja de papel.

Y sus sospechas se confirmaron cuando la chica se presentó.

- Usted debe ser el señor Jeon. Es más atractivo de lo que imaginé...- susurró con tono coqueto, mordiendo su labio inferior y recorriendo al contrario con la mirada.- Mi nombre es Lía. Debe saber que nuestros padres acordaron una posible inversión e independientemente de como resulten las cosas entre nosotros podemos llegar a tener más beneficios.- extendió su mano esperando que el azabache le devolviera el saludo besando sus nudillos.

No había chico que no se resistiera a su belleza, así que tenía las de ganar, siempre.

Jungkook no dijo nada, arrugó la nariz al olfatear las empalagosas y desagradables feromonas que soltaba la Omega. Lo estaban mareando.

Se cruzó de brazos y piernas en el asiento detrás de su escritorio y analizó las palabras de aquella mujer. Sin duda no lo conocía. Él podía conseguir inversiones mejores sin la necesidad de un matrimonio arreglado y peor aún, sin amor.

-Me temo que eso no va a ser posible. Cuando esté lista para empezar a trabajar puede pedirle a mi secretario que la guíe a su oficina, si no está dispuesta a realizar su trabajo puede retirarse. Estoy seguro que habrá alguien más que este interesado y sea digno de éste puesto.

- ¡No puedes hacer eso!, ¡¿Acaso no sabes quién soy?!- reclamó como toda una niña mimada.

El alfa se levantó de su asiento abotonando su saco.-Si me disculpa se está haciendo tarde y necesito pasar por mi omega para irnos juntos a casa.- una sonrisa se escapó de sus labios sin querer y se fue sin prestar atención a las constantes quejas detrás de él.

Debía averigüar a toda costa quién era esa omega. Ella ya tenía toda su vida planeada tal como sus padres querían, como lo deseaba y  como debía ser y no sé podría arruinar por culpa de un tercero.

[...]

Era Domingo y tal como lo prometió, Jimin y Taehyung fueron de compras.

–¿Qué te parece esta blusa? Es bonita, ¿cierto?– preguntó el rubio.– ¿Le gustará?– dijo pensativo, quería sorprender a su esposo en su cita.– ¿Taehyung?

Jimin notó que su amigo estaba en las estrellas desde que llegó.

– Ahhh sí, deja de pensar tanto, a Yoongi le gustas hasta con una bolsa de basura puesta.– contestó el peliplatinado rondando los ojos.– Pero, ¿que te parece éste? El blanco te queda muy bien. Además dijiste que le gustó la lencería del mismo color que elegimos esa vez.– dijo subiendo sus cejas insinuante.

Jimin se sonrojó más no negó nada, le arrebató el atuendo a su amigo y se perdió en los probadores para ponérselo. Luego de unos minutos salió. Taehyung sonrió y subió sus pulgares en aprobación. Después de cambiarse se dirigieron a la caja a pagar. Le ofrecieron la tarjeta a la cajera y esperaron para realizar la compra.

– Lo siento mucho señor pero su tarjeta no pasa. No-no puede llevarse este atuendo.– tartamudeo la cajera beta sin poder mirar a los ojos a los dos omegas que no dejaban de verla analizando la situación.

–¿Cómo puede ser eso posible? Estoy seguro de que éste traje no cuesta más que el dinero en ella. Mi esposo no es un doctor reconocido por nada.– habló indignado el rubio con una mano en su cadera y mirando a la contraria de arriba a abajo. Notó que la beta no se dignaba a mirarlo, su espalda estaba encorvada y se veía nerviosa.

–No te preocupes Chimchim. Tome mi tarjeta.– ofreció Taehyung su tarjeta seguro de sí mismo, tenía suficiente dinero ahorrado y el traje solo era un gasto mínimo para él, además si su mejor amigo era feliz él también lo sería.

Antes de que la cajera tomara la tarjeta un hombre omega entró rodeado de guardaespaldas a la tienda de ropa.

– ¿Dónde está mi traje? Acabo de llamar y me dijeron que solo quedaba uno.– bajó sus gafas y recorrió de pies a cabeza a los chicos frente a él y notó el traje en el mostrador.– Oh, debe ser ese.– apuntó con el dedo.– Dámelo.– les dijo.– ¡Ahora!

–Lo siento pero yo llegué primero y estaba a punto de pagar.– dijo firme Jimin.

– ¡Ese traje es mío!– chilló irritado. Tomó un extremo de éste jalando mientras que el omega rubio sostenía el otro extremo. Taehyung solo miraba molesto a la cajera.

–Nosotros llegamos antes y por derecho nos corresponde, así que pagaremos por el y nos iremos.– habló el peliplatinado.

Una persona los observaba desde la entrada, las personas se detenían a apreciar la belleza que irradiaba y reconocieron a tan importante figura rodeada de guardaespaldas y de aura intimidante.

–Les pido que se retiren de aquí, si no quieren que llame a seguridad es mejor que se vayan por su cuenta.– demandó la cajera.

–¡Esto no es justo!...– gritaron.

–¿Qué está pasando aquí?– una voz habló adentrándose al lugar y todos los presentes guardaron silencio...

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¡Hola!

Una disculpa por la tardanza, estuve un poquito ocupada pero aquí les dejo este maratón.

Espero les guste, la verdad no estaba segura de si seguir escribiendo jajaja. Me gusta crear historias en mi tiempo libre pero no tengo mucho apoyo. Pero por mis tres fans terminaré las dos historias que llevo y si les interesa alguna otra de las ya publicadas la continuaré.

¡No se olviden de dejar su estrellita y comentar!:)

Gracias por el apoyo.
Los tqm.<3