Las ilusiones se disfrazan, a veces de goteros, con dosis parcas y pesadas.
Otras veces son pulverizadores que hacen nubes de vuelos altos.
También hay otras
que desgarran,
dejan bordes filosos,
puntas de caligrafía
que trazan arterias hilo,
segundos contados,
un corto abrazo,
palabras que caben
en un grano de arroz,
un disparo de cometa,
brotes erizados en la piel,
las sombras de las chispas
de un encendedor barato.
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Silencios después de encallar
PoetrySentir después de llegar a una playa distinta a la que se creía conocida.
