✪𝑂𝑛𝑒 𝑆ℎ𝑜𝑟𝑡𝑠✪ 𝑪𝒂𝒍𝒍 𝑶𝒇 𝑫𝒖𝒕𝒚 (𝑃𝑒𝑟𝑠𝑜𝑛𝑎𝑗𝑒𝑠 𝑥 𝑇/𝑁)

𝑨𝒍𝒆𝒋𝒂𝒏𝒅𝒓𝒐 𝑽𝒂𝒓𝒈𝒂𝒔

Narrador Omnisciente:

Hacía tiempo que T/N y Alejandro no se veían, ella era agente especial en la SAWT; ella por veces solía recordarlo, aún que no muy claramente, casi jamás intercambio palabra con él pero nunca pudo negar que era uno de los mejores agentes que pudo conocer.

Todo lo contrario con el mexicano, ese hombre estaba encantado con ella, aquel espíritu de valentía, su sola presencia; su mundo se detenía; solo tenía un minúsculo problema, ella era una mujer casada y jamás cruzó palabras con ella que no fueran en torno al trabajo, bueno quizá una que otra vez, pero no eran las personas más unidas exactamente.

El destino era extraño, que los juntó en una reunión entre las fuerzas armadas mexicanas, solo los que eran seleccionados como los mejores y las fuerzas estadounidenses que duraría un mes; haciendo que el hombre se encontrase con esa mujer de la que tanto gustaba.

-T/N- ¿Alejandro?

-Alejandro- ¿Allen? Mujer te hacía muerta ya.

-T/N- Soy el veneno puro, ¿crees que moriría tan fácil?

-Alejandro- Definitivamente no, es bueno verte luego de mucho, cuéntame ¿qué fué de ti?

-T/N- Vaya, han pasado varias cosas... Pero te diré que de nada me quejo.

-Alejandro- Mujer con energía.

-T/N- Dime tú hombre, ¿qué fué de ti?

Ambos entablaron charla rápidamente, parecían amigos de toda la vida, a pesar de jamás haber hablado tan amenamente cuando trabajaban juntos.

-Alejandro- Bueno ¿Y tu esposo?

-T/N- Meh, él y yo no estamos juntos desde hace más de un año, vivo sola con mi hijo en Detroit.

-Alejandro- ¿Hijo?

-T/N- Sí, su nombre es Devon, tiene cinco años.

La mujer sacó su billetera con la foto del pequeño, cabello oscuro, ojos del mismo tono un poco achinados.

-Alejandro- El condenado se parece a ti allá a lo lejos.

-T/N- Se, se, pero es un amor. Dime tú ¿por fin te casaste?

-Alejandro- Nah, soy militar, ¿me ves con cara de tener tiempo para eso?

-T/N- Sep

-Alejandro- Pues si lo tengo, pero no, porque aún no he encontrado a la persona que encaje conmigo.

La mujer solo dejo salir una leve risa ante esa aclaración. Definitivamente, Alejandro no había dejado de verla con esa admiración y aquella presencia seguía siendo la misma, aún que un tanto apagada.

Luego de aquella reunión quedaron en verse, él la invitó a salir a caminar o solo tomar un café, ella aceptó y dos semanas enteras ahí se encontraban en un café para charlar, sobre su vida, problemas amorosos y una que otra pequeña mención del vaquero hacia aquellos sentimientos lejanos suyos todas las mañanas de las 09:00 AM hasta las 11:00 AM, pues la mujer debía recoger a su hijo de la escuela.

-T/N- Es un gusto haberte visto hoy, pero debo recoger a Devon a la escuela.

-Alejandro- Te llevo, ¿No tienes problema con eso verdad?

-T/N- Alejandro no te gustan los niños.

-Alejandro- No, no, no, vamos por mi no es ningún problema.