Qué fracaso, ¿No? A estas alturas ya es para que hubiera dejado de intentarlo. Sobretodo porque mis intereses amorosos eran en su mayoría, por no decir que todos, a DISTANCIA.
Pero ahí voy de nuevo, y con las ganas aún por Amelia, conocí a otra chilena y caí por ella rápidamente.
La verdad no duró nada, fue un coqueteo ligero, pero mutuo. De hecho, ni siquiera fue relevante, cómo todos los demás ligues que tuve después de mi “relación seria” con Rocío.
Pero ella fue genuina, no voy a mentir. Aunque nunca hablamos con base a tener algo a largo plazo, me fleche horriblemente por no decir que estaba enamorada.
Al parecer soy alguien fácil de impresionar.
En esta ocasión fui la primera en confesarse, no tan desesperada ni con ganas de tener algo, solo lo dije porque ya no quería volver a decepcionarme.
¡Y funcionó!
Con Katalina fue todo muy distinto, de hecho, al final la terminé ayudando y le declaró sus sentimientos a su mejor amiga.
¡Ellas eran tan lindas! Dios mío, fue la mejor pareja que pudo haber existido.
Aunque creo que hace poco terminaron... En fin, está fue la primera vez que huí del amor sin el corazón hecho trizas.
Muchos oensariantqie a partir de ahí todo volvió a ser diferente y mejor para mí.
...
Pero no.
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𝓐 𝓽𝓸𝓭𝓪𝓼 𝓵𝓪𝓼 𝓬𝓱𝓲𝓬𝓪𝓼 𝓭𝓮 𝓵𝓪𝓼 𝓺𝓾𝓮 𝓶𝓮 𝓮𝓷𝓪𝓶𝓸𝓻𝓮 ©
Literatura Kobieca"𝐿𝑎 𝑑𝑒𝑠𝑝𝑒𝑑𝑖𝑑𝑎 𝑒𝑠 𝑡𝑎𝑛 𝑑𝑢𝑙𝑐𝑒 𝑝𝑒𝑛𝑎 𝑞𝑢𝑒 𝑑𝑖𝑟𝑒 𝑏𝑢𝑒𝑛𝑎𝑠 𝑛𝑜𝑐ℎ𝑒𝑠 ℎ𝑎𝑠𝑡𝑎 𝑞𝑢𝑒 𝑎𝑚𝑎𝑛𝑒𝑧𝑐𝑎" -𝑅𝑜𝑚𝑒𝑜 𝑦 𝐽𝑢𝑙𝑖𝑒𝑡𝑎