🍂Capítulo ocho🍂

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Luego de eso Anna la dejo descansar y Yarin miró el techo de su habitación por unos minutos y le oraba a Dios para que fuera sanara y ella tenía de de que iba a ser a si. Luego Amenotep entro a su habitación y está lo vio y sonrió levemente, Amenotep se sentó en el borde de la cama de esta y la miró

—Estas bien—dijo Amenotep

—Si—dijo Yarin—gracias

Amenotep tomo una de las manos de Yarin y bio la palma de esta donde vio que estaba toda maltratada y lastimada

—Es un moustro—dijo Amenotep

—Ella solo hizo lo que creyó que era mejor—dijo Yarin

—Mejor—dijo un poco molesto—Ahora estás lastimada y enferma, crees que eso es mejor

—Pues si—dijo Yarin y Amenotep no pudo creer lo que estaba diciendo—Dime algo si tú tienes en tu siembras en el jardín flores de amapolas, cuando creescan tendrás jasmines?

—Pues claro que no—dijo Amenotep

—Y que vas a recoger?—dijo Yarin

—Pues amapolas—dijo Amenotep

—Asi mismo es el corazón—dijo Yarin—Si siembras amor, tendrás amor. Pero si siembras odio, recogerás odio

Al decir eso Yarin Amenotep se entristeció ya que el estuvo casi toda su vida en ese mismo odio

—Pero hay una cura para ese odio—dijo Yarin

—Y cual es?—dijo Amenotep

—Siembra amor—dijo Yarin—Pero antes debes ir al gran yo soy para sembrar las semillas

—Y quien es yo soy?—pregunto Amenotep pero fue interrumpido por la reina

—Como te sientes—dijo la reina

—Bien gracias—dijo Yarin

—Me alegra oír eso—dijo está sonriendo—Puedo ver tus manos?

Yarin asistió y le enseño la mano a la reina y está la observo con mucho cuidado y luego miro a Yarin y colocó su mano con delicadeza sobre la de Yarin

—El asistente del sacerdote me dijo que no querías tomar las medicinas—dijo la reina

—Que?—dijo Amenotep mirándola

—Si no quieres las medicinas—dijo la reina y le entrego un pequeño frasco—Al menos ten esto para que no se te queden las marcas en las manos

—Esta bien—dijo Yarin sonriendo

La reina salió dejando nuevamente a Yarin con Amenotep, ella solo miraba el techo mientras que Amenotep la miraba a ella

—Es un poco incómodo que me observes constantemente—dijo Yarin y lo miro

Amenotep sonrió

—No puedo evitarlo—dijo Amenotep—Y aún no me creo que valla a casarme con alguien como tú Asenett

Yarin se puso un poco incomoda por lo que dijo Amenotep y en ese momento Anna entro a los aposentos de Yarin

—Principe Amenotep—dijo está—Pense que Yarin, digo Asenett estaba sola

—Venias a decirle algo?—dijo Amenotep mirándola

—Bueno...—dijo Anna mirando a Yarin y está asintió dándome a entender que tenía confianza en Amenotep—Entonces puedo decirlo?

Amenotep miró a Yarin y está sonriente dijo que si

—Mi madre organizo una pequeña fiesta esta noche con varios hebreos que viven aquí en egipto—dijo Anna—Y dice que quiere que vallas

—Y cuando es?—dijo Yarin

—Ese es el problema—dijo Anna—Es esta noche y tú estás enferma

—Desde cuando eso es un impedimento—dijo Yarin

—Espera Asenett—dijo Amenotep—Estas enferma y debes quedarte en cama

—Amenotep—dijo Yarin mirando—Como único voy a estar mejor es si me dejas ir a esa fiesta

—Pero debes descansar—dijo Amenotep

—Por favor—dijo Yarin

—Si quiere príncipe puede ir y cuidarla—dijo Anna

—Por favor—dijo Yarin

—Esta bien—dijo Amenotep—Pero no me voy a separar de ti ni un segundo

—Jajajaj—rio Yarin—Esta bien

En la noche los chicos salieron del palacio sin que nadie se diera cuenta. Llegaron a la fiesta muy animados y Yarin fue la primera en salir corriendo a danzar con los demás

—Espera Asenett—dijo Amenotep y Anna lo detuvo

—Amenotep—dijo Anna agarrándolo del brazo—Deja que ella se divierta—sonrio—mirala, está feliz

Amenotep la miro y noto que lo que dijo Anna era verdad. No la había visto tan feliz en el palacio como la vio ahora. Amenotep seguía mirando a Yarin y noto que está se quitó las sandalias y siguió danzando y cantando como si no hubiera un mañana

—Porque no bailas—dijo Anna con algunos dátiles en las manos y algunos en su boca

—Bueno primero no se cómo se hace—dijo Amenotep mirándo a Yarin y vio que esta estaba danzando con un chico

—Bueno si no lo haces tú otra persona más lo hará—dijo Anna haciendo que se activarán un poco los celos de Amenotep

Amenotep se dirigió donde estaba Yarin y la tomo de la mano dándole un vuelta y está lo vio algo desconcertada. Amenotep algo apenado hizo un gesto invitando la a bailar lo cual ella sonrió y acepto

—No sabía que te gustaba danzar—dijo Yarin alegre

—En realidad no se—dijo Amenotep—Te gustaría enseñarme

—Jajajajaja—rio Yarin—esta bien

Ambos estuvieron la noche entera bailando y cantando al ritmo de la música lo cual hacia alegrar el corazón de ambos y en parte hacia crecer un poco su amor por el otro

Continuara...

La novia del faraón <<T1>> Libro 1 [Terminada] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora