Spreen... un alfa dominante, un chico mimado, revelde, atractivo, guapo, irresponsable y desmadroso, lleno de lujos y comodidades en su vida, hijo único de Vegetta y Rubius de Luque.
Roier..... un omega, un chico amigable y carismático, amigo de tod...
Esta semana y ya termino el último parcial que bendición.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
-Y bien, ¿cómo te sientes?- preguntó Roier.
-Nha no me quejo, sinceramente prefiero usar esta ropa que el uniforme puto del colegio.
-Bueno- contestó sin importancia mientras alzaba sus hombros- Voy por la hamaca, tu duerme en mi cama si quieres wey- añadió para después salir de la habitación e ir a la parte baja de la casa.
Cuando llegó a bajo fue hacia la cocina donde se estaba Mariana quien se encontraba guardando la comida del día en el refrigerador.
-Oye apa, ¿sabes dónde esta la hamaca?
-Ay mijo, tú papá la tiene, está en la sala y apenas se acostó.
Genial, ahora Roier dormirá en el piso, que felicidad.
-Pero si quieres le digo que se levante y te la de no te preocupes- dijo Mariana para después dirigirse a la sala dónde se encontraba su esposo.
Roier iba a negarse pero no pudo articular una palabra ya que su papá se había ido del lugar, así que prefirió seguirlo.
-Ey tú, mamahuevo- dijo Mariana mientras le pegaba con el trapo de la cocina a Slime que yacía cómodamente en la hamaca.
-¿What's up my bitch wife? (¿Qué pasa mi puta esposa?)
-Levanta tu culo de la hamaca que el niño la necesita, pero como vas- dijo Mariana mientras chasqueaba sus dedos en señal de que se apresurara.
Slime se le había quedado viendo a su esposo de manera indignada, ¿lo decía en serio?, se lo pedía en ese momento en el cual ya había logrado subirse a esa cosa después de 5 intentos y a la vez partiendose la madre en el intento. Slime le tenía miedo a Mariana a lo que siempre le hacía caso cada vez que usaba ese tono, pero al parecer esta vez los huevos los tenía bien puestos para responderle a su lindo y atemorizante esposo, asi que dijo lo siguiente:
-No
-¿No?- repitió Mariana alzando una ceja
Slime se estaba arrepintiendo pero, una vez dicho eso no había vuelta atrás, así que tragó saliva y volvió a responder.
-No
-¿Cómo de que no hijo de tu puta madre?, ahorita vas a ver como chingados no.
Y asi inició una guerra entre ambos padres por quien le hacía caso a quien, Mariana trataba de tirar a Slime de la hamaca para mandarlo al piso mientras que Slime se aferraba como garrapata a la hamaca como si su vida dependiera de ello.
Roier solo se limitaba a verlos desde la entrada de la sala mientras se reía de como peleaban torpemente, iba a detenerlos pero quería disfrutar de esa pequeña pelea un poco mas.
Slime y Mariana eran así, se peleban, claro que sin llegar a ser peleas fuertes, se insultaban, se criticaban y luego se daban amor como si no se lo hubieran dado en días, no eran tóxicos, solo se querían a su manera y él y JuanaFlippa sabían la forma de amar de sus padres.
