Midoriya notó a su amigo más serio de lo habitual, durante todas las clases parecía perdido, también notó cómo Bakugo lo miraba esperando alguna reacción pero no pasaba nada.
El día estaba nublado por lo cual el heterocromatico decidió ir a la azotea del edificio para entrenar. Izuku lo alcanzó para hablar con él.
—¿Ah?
—Lo que pasa es que pareces más distraído, algo desanimado.
Después de la ráfaga de hielo, exhaló para regresar a verlo.
—Bakugo.
—¿Eh? ¿Qué tiene Kacchan?
—Él no es feliz conmigo —reveló volviendo a ponerse igual que como estuvo en todo el día.
—¿Por qué dices eso? ¡Te quiere mucho!
—Yo lo escuché, se está aburriendo de nuestro noviazgo y quiere terminar conmigo.
Por la impresión el pecoso casi resbala pero negó de forma excesiva.
—No digas algo así, Kacchan parece a gusto contigo.
—Pero él mismo lo dijo, que quiere acabar con esto porque yo-
—¿Tuvieron algún problema?
Decirle que era por un asunto sexual no le parecía correcto.
—No sé manejar todo lo que tiene que hacer un novio, no sé cuál sea, pero hay un área donde estoy fallando y eso hace que no lo pueda complecer del todo.
Shoto creía que lo estaba haciendo bien, se sentía muy a gusto y por tanto pensó que su novio se sentía igual.
—Mi conclusión es que no me lo dice porque le avergüenza confesarme en donde no estoy proporcionándole lo que quiere.
—¿Estás seguro? Es decir, Kacchan parece una persona que tocaría un tema como este —comentó pensando.
—Desde que lo escuché no he sabido acercarme.
—Él ya debió haberlo notado, ¿lo seguirás evitando?
—No tengo idea.
Todoroki se preguntaba porqué no tuvo la confianza para decírselo.
—Lo mejor que puedes hacer es hablar con él.
—Tal vez debí esforzarme más.
El peliverde en cualquier momento se soltaría a llorar si su amigo seguía diciendo algo como eso.
—¡Vamos, Todoroki-Kun! Entre los dos pensemos una forma para que puedas charlar.
Mientras, en los dormitorios, Katsuki no quiso darle tantas vueltas al asunto, Todoroki seguro ocupaba tiempo; vendría cuando fuera correcto.
[...]
Bakugo borró lo que había en el pizarrón mientras que la castaña asentía.
El rubio se fue a la sala común a relajarse, es era el plan hasta que la chica regresó con él.
—¿Ahora qué?
—Me quedó una duda.
—Te dije que me dijeras todo allá, ¿qué es?
La castaña de pronto se puso un poco roja.
—Tengo la duda desde hace tiempo y hace un momento no te la hice porque no recordaba. ¿Cómo hacen las mujeres para hacerlo entre ellas?
[...]
—¡Me sorprende que no pueda saber algo así!
—¡Bakugo, son temas difíciles de tocar!
Al de doble don le parecía raro escuchar la voz de Uraraka pero se quedó a escuchar, se podría decir que estuvo escondiéndose de Katsuki durante el día.
—No lo son, pero como no se le ocurre lo lógico de investigar todo es en vano.
—En parte es de entenderse, ¿no? Después de todo el sexo es- después de todo el sexo entre...
Trató de agudizar su oído pero fue en vano, ya habían comenzado a murmurar.
—Perdona por no estudiar sobre ese tema... —dijo mirando la cabeza de su novio aunque este no lo supiera, después de forma silenciosa se fue directo a su habitación.
[...]
—El sexo entre mujeres debe ser algo que le avergüenza.
—Pues todo lo que te dijo esa conocida ni es así.
—¿Entonces?
—Comparado con hombres, entre mujeres no es tanto procedimiento, es más juego que pueden meterle. Al no tener que usar necesariamente la penetración, pueden explorar lo que quieran. Si se incluye algún juguete sexual solo es saber usarlo.
—Más sensibilidad...
—Algo así. Se disfruta todo lo que se quiera. Aunque haya lubricación en ambas partes debe haber cuidado de no ser tan brusca.
Un bostezo salió del rubio, entre clases, entrenamientos y demás, estaba exhausto.
—¡Gracias, Bakugo!
—Vete a dormir, cara redonda.
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Como una parvada los aviones se miraban, y entre el fuselaje viajaba la colombiana~
