Daniela caminaba por los verdes campos de puerto madero, sintiendo la suave brisa en su rostro y el sol calentando su espalda. mientras caminaba, cantaba suavemente la letra de "Wildest Dreams", preguntándose si algún día encontraría a alguien que hiciera realidad sus sueños más salvajes.
de repente, vio a lo lejos a un chico... ese era ivan, con cabello oscuro y largas pestañas. era como si él fuera una aparición, y cuando se acercó, él le sonrió.
la rojiza no podía creer su suerte de encontrarlo, así que se acercó a él para entablar una conversación.
la atracción entre ellos fue inmediata. Daniela se sentía como si estuviera en un sueño. mientras hablaban, notó que la luz empezó a disminuir, y el paisaje se convirtió en un mundo surrealista.
mientras estaban sentados frente al sol, se abrazaron y hablaron de muchas cosas importantes, como lo solían hacer por mensaje.
pero no podía entender por qué todo esto parecía... demasiado perfecto.
de repente, la luz regresa y todo se desvanece. ella se da cuenta de que había estado dormida y comprende que lo que experimentó fue sólo un sueño. pero aunque fuera sólo un sueño, no podía sacudir la sensación de que estaba enamorada de alguien que podría hacer realidad sus sueños más salvajes.
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veía el directo del morocho que me traía loca, se veía tan bien con esa remera toda fachera.
estaba comprando cosas que quería de pequeño. el chat se dió cuenta de que estaba viendo así que comenzaron a mencionarme, no me quedó de otra más que interactuar.
— ¿cuántos son 26 centímetros?. – preguntó intentando adivinar la medida con sus manos.
✅nanicotina: como tu pija, ponele
lee mi comentario en el chat en voz alta y ríe.
— ah, entonces como esto. – sube sus manos una banda dejando un espacio de unos 50 centímetros.
