Stockholm Syndrome [En edición]

Chelsea

- Bueno... Un nuevo país, una nueva ciudad y nueva casa- dijo papá mientras abría la puerta de nuestro nuevo hogar.

- Oh, que linda- dijo mamá mirando la decoración de la casa. Papá se encargó de realizar todos los detalles de ésta, para que sea una sorpresa de él hacia nosotras.

Subí a mi habitación. Era simple. Paredes pintadas de color beige, una cama grande, un escritorio con su silla a juego, una mesita de noche con una lámpara en ella y dos puertas, una del armario y la otra del baño.

Desempaqué y me cambie de ropa. Me puse unos jeans negros, una camiseta blanca y unas vans negras. Ya lista, suspiré profundamente y bajé a la sala donde estaban papá y mamá, hablando de sus trabajos. De nuevo, no hemos mudado por eso, por los trabajos siempre están en ellos o hablando de ellos.

- Mamá, papá- hablé en voz alta para que me escucharan. -iré a dar una vuelta para conocer la ciudad, ¿sí?- dije caminando hacia la puerta, de todos modos conocía sus respuestas.

- Mmh ok- dijeron al unísono y solo asintieron siguiendo metidos en lo suyo.

Salí de la casa y empecé a caminar hacia donde fuese. Me coloqué los audífonos y solo seguí caminando, metida en la música y sin darme cuenta, me tropiezo con alguien.

- Disculpe, no miraba por donde iba- dijo ella. miré hacia arriba. Era una chica de cabello un poco más debajo de los hombros, alta y de ojos marrones.

- No importa era yo quien iba con los audífonos- sonreí cortésmente.

- ¿Eres nueva en la ciudad? Si no me equivoco, no te había visto por aquí.-pregunta con curiosidad. Me mira como si estuviese analizándome. Me incomodo.

- Si, recién llegue hoy.- digo tímidamente. Ella me da buena espina. Decido arriesgarme. - ¿Me puedes hacer un favor?- sonreí abiertamente.

- Sí claro, ¿cuál?- dijo alegre. Ésta chica está empezando a caerme bien.

- ¿Me enseñas la ciudad?- pido con voz de puchero. Ella ríe fuertemente.

- Sí, claro que sí- dice contenta. Sonrío. –Oye, me gusta tu cabello- señala mi melena azul oscura. –Es un poco más oscuro que el mío.- señala su cabello de un azul más claro que el mío.

- Oh, gracias, y a mí me gusta el tuyo- dije sonriente.

- Oh, que maleducada soy- hizo un ademán con sus manos. –Mi nombre es Chelsea.- me tiende la mano.

Me enseño sus lugares favoritos en Londres. Tiene mi edad, 17, y al parecer iremos a la misma escuela, creo que he empezado con el pie derecho en Inglaterra. Me divertí mucho con ella. Por un instante, creo que me he relajado.

[...]

- ¿Hola?- dije en voz alta al entrar a mí casa, para llamar la atención de mis padres. Nadie respondió así que fui a la cocina. Claramente lo único que sé hacer es cereal y leche. Agarro un plato y me sirvo un poco. Lo pongo en una bandeja y me dispongo a ir hacía mi recamara.

Entré y dejé la bandeja en la mesita de noche. Suspiré profundamente, tenía algo de sueño pero no quería dormir, así que encendí el televisor y comencé a hacer zapping a ver qué película buena estaban dando. Comí mi cereal y sin pensarlo, me quedé profundamente dormida.

Cuando desperté Noté que ya había anochecido. Bostecé audible. Me cambié por algo más ligero y bajé a la sala a ver si mis padres habían llegado. Observé el reloj de la sala, Las 10:30pm. Dormí demasiado. No me sorprende que mis padres no estén aquí, siempre están trabajando.

Subí nuevamente a mi habitación. No tenía sueño y como no había nada que hacer, me puse a jugar con el celular. De repente me llegan dos mensajes, uno de mamá, Y el otro dice "desconocido"

"No nos esperes despierta. Llegaremos más tarde, estamos trabajando." –Mamá

"¡Hola! Soy Chelsea, éste es mi número. xx"

{...}

La luz del sol entra por mi ventana haciéndome abrir los ojos. Miro la alarma de mi mesita de noche. 9:00am... muy temprano. Es raro en mí. Me levanté perezosamente de la cama. No quería estar en casa hoy.

Me arreglé y salí disparada de la casa. Quise desayunar afuera, pero no conozco nada, así que me tocará caminar.

Veo una cafetería y de ella emana un olor delicioso. Entro al local y me siento al final del pasillo a esperar que una camarera se me acerque para pedir. Abrí mi bolso y saqué un libro, llevaba dándole vueltas por todos lados y no tenía oportunidad de sacarlo y leerlo. Mi paranoia o mi locura me invaden porque siento una mirada fija en mí. No le tomo importancia y sigo leyendo.

De repente el puesto a lado mío es ocupado por una persona, me asusta por un momento, pero luego me relajo.

- ¡Hola!- Levanto la mirada y una enérgica Chelsea me sonríe

- Hola Chels- Saludo y la beso en la mejilla.

- Estoy con mis amigos- señala una mesa al principio del pasillo.- ¿quieres sentarte con nosotros? – hace puchero.

- No se... es...- No me deja terminar

- ¡Daleee! Mira que soy la única mujer en el grupo.- Hace puchero. Yo entrecierro los ojos.

- Vale...- Digo finalmente dejándome convencer por los encantos de ésta mujer. Guardé el libro de nuevo en el bolso y me dispuse a caminar hacia la mesa que Chelsea señaló. Ella se sentó y en el medio había un asiento disponible, entré como pude y logré sentarme finalmente. No me había percatado que al lado mío había un chico despaldas con un hermoso y sedoso cabello rubio.

- Bueno- dijo Chelsea carraspeando la garganta.- El es mi hermoso novio, Harry,- Señala a un chico de ojos verdes y un largo cabello oscuro rizado. – él es Liam – un chico de ojos mieles y cabello corto. –El, Louis – Sus ojos azul bebe me encantaron y ese cabello también, una sonrisa lobuna cruza su cara. –El es Zayn – señala a un chico morocho, ojos más claros que los de Liam y repleto de tatuajes. Parece malo, pero me gusta su actitud – y finalmente, el es...- No la dejé terminar, el chico que estaba despaldas se dio la vuelta y me dejó anonadada.

- Niall – Respondí por ella. Causando que todos quedaran confundidos.

- Hola- dijo éste con una sonrisa en sus labios.

- ¿Lo conoces? – Preguntó Chelsea confundida y a la vez con una mirada de diversión.

- Si, en el avión- respondí después de salir de mi ensoñación. - venía conmigo. Se sentó al lado mío.

- Aaaaa –Respondieron todos al unísono.

Decidimos salir todos a un parque cerca, caminamos y conversábamos riendo o avergonzados. Sentía la mirada de Niall en mí. Me gustaba pero a la vez me incomodaba. Se hizo un poco tarde y se lo hice saber a Chelsea.

- Y ¿Por qué no te quedas en mi casa hoy?

- ¡Claro!- respondí entusiasmada. – Sólo déjame y aviso a mis padres. –Respondí sacando el teléfono de mi bolsillo trasero.

"Mamá, papá; hoy me quedo a dormir en casa de una amiga. Sólo les aviso para que estén anuentes. Xx"

——-

Hola, Hola, Hola, soy yop la autora, obvio xD

Espero le haya gustado el capítulo recuerden votar, y comentar. :) <3 :3

Si se dieron cuenta no le llaman por un nombre (a la protagonista) porque aún no le he escogido.

Creo que el siguiente cap será el secuestro *obvio se llama stockholm síndrome* yap mucho spoiler por hoy.

Voten!!!!!

Comenten!!!!

bye