Dicen que cuando la persona a quien amas, te ha hecho feliz y triste al mismo tiempo, es cuando verdaderamente estás enamorado.
Pero Chan tenía un problema, porque cada que minho le decía "adios", el respondia "hola" de regreso
- Historia original...
Horas después de la discusión, Chan de nuevo estaba llorando bajo las sábanas de su cama y sintiéndose fatal pensando en que había hecho mal durante su vida como para merecer todo el daño que prácticamente se hacía el mismo.
¿Porque seguia con Minho? ¿Porque siempre priorisaba al castaño? ¿Porque se estaba engañando a sí mismo creyendo que Minho en algún momento iba a cambiar? ¿Porque perdía su dignidad rogando un poco de atención? ¿Porque el menor parecía tener indiferencia al tratarse de su relación?.
Otra vez.
Otra vez eran las mismas tontas preguntas y los mismos tontos pensamientos de siempre. Pero no podía evitarlo, no podía dejar de creer que quien tenía un problema era el. Que todo lo malo que ocurría era porque de alguna forma si se lo merecía.
De pronto su teléfono comenzó a sonar informando que era una llamada y contestó sin mirar la pantalla.
- hola?
- Chris, podemos hablar?
- Si, minho..
- Bien... Oye se que lo que dije en la tarde estuvo pésimo e incorrecto, que no debí tratarte de esa manera.. Yo lo siento, Chris ¡Pero es que tu me celas hasta porque miro a Jisung, eso molesta!
- Ya te lo dije, Minho... no son celos, es molestia.. Pero ya no importa, olvídalo. Intentaré controlarme ¿Okey?.. te hablo más tarde, mi hermosa me esta buscando. -mintió y finalizo la llamada sin esperar respuesta.
Quizá minho si tenía un poco de razón, pero de todas formas el tenia derecho de molestarse.
¿Porque actuaban así? ¿Porque se lastimaban?
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—Te amo..
— Yo también, bebe
— Si me amas, entonces ¿Porque no me miras?
El rubio carcajeo.— Porque estaba respondiendo un mensaje de mi mamá, pero ahora si tienes mi total atención ¿Que ocurre? — pregunto sonriendo y volteandose para quedar a centímetros del rostro contrario.
— Pero no tan cerca que me pongo nervioso, fuera~.. —murmuró risueño el menor, interponiendo una de sus manos entre ambos.
— ¿Sigues con nervios a pesar de que llevamos juntos poco más de un año? —susurro el rubio, quitando el brazo contrario y volviendo a acercarse a propósito.
— Sí, fuera Chrischris.
Ambos sonríen y el mayor acortó la distancia con un beso en los labios. Permaneciendo hundidos en su burbujita de amor
