CAPÍTULO 10

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(Mini maratón 1/2)

                      (Mini maratón 1/2)

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MAX WRIGHT

Al despertar vi el reloj, aún era temprano así que no tenía prisas para levantarme, mucho menos quería hacerlo cuando tenía una mariposa enganchada en mi costilla derecha, si, ver a Ally aferrada a mí como si tuviera miedo de que me fuera hacía que mi ego creciera aún más "Ally" joder hasta su nombre era hermoso aunque me gustaba más decirle Hanssen, hace que cuando le hablo suene con más autoridad de la que creo tener en ella porque siendo sinceros ella sería la que controlaría a mi, desde aquella noche en que la vi con esos leggins y ese top ajustado hizo que se me pusiera dura e investigar sobre ella y enterarme que era la misma Ally de mi infancia hizo que mi deseo de poseerla llegarán más allá de su límite.

Pasado....
11 años atrás.......Salen, Massachusetts

-prometeme una cosa Ally- dije en un tono muy serio para mi edad.

-Que pasa maximo- dijo esa voz que siempre sería una melodía para mis oídos.

-Que cuando seamos grandes vamos a estar juntos, jamás estarás con un hombre que no sea yo- dije con autoridad- y que cuando nos volvamos a encontrar nos vamos a casar.

-Aun estamos muy pequeños para pensar en esas cosas maximo- dijo Ally.

-No importa, mi corazón será tuyo siempre Ally.

-Esta bien maximo, cuando seamos grandes nos vamos a casar.- dijo por fin, yo sabía que no fallaría a su promesa.

Aún era un niño, mi padre era un mafioso, el mataba y transportaba sustancias ilícitas a muchas partes, desde que tengo memoria el me ha enseñado todo lo que necesitaría saber en un futuro para llevar este negocio, como los empaques, las armas, también a como usarlas para defenderme o defender a la mujer que ame algún día y sin duda alguna esa sería Ally Hanssen.

ACTUALIDAD

Para mi suerte, aún conservaba el dije de un collar que le regalé cuando éramos niños y se preguntarán como fue que llegó a mis manos, la respuesta es fácil, cuando ella supo que me tenía que ir, me devolvió el dije y me dijo que cuando fuéramos adultos, la buscara y se lo mostrara y así ella se daría cuenta que era yo.

Pensar que solo éramos unos niños cuando se lo pedí y aunque ella no me recordara sabia que cumpliría su promesa aunque no nos casariamos ella estaría conmigo siempre, ella sería mi jodida perdición, desde niño nunca la olvide, siempre estuvo conmigo sin importarle quienes eran mis padres y lo peligroso que era estar conmigo, desgraciadamente cuando mi padre empezó a ganar más dinero nos mudamos a otro país y no lo negaría, en ese lapso de tiempo estuve con mujeres pero siempre eran para celebrar mis cierres de negocios con hombres importantes de sociedades altas, ahora yo era uno de ellos porque gracias a las enseñanzas de mi padre, estoy en la cima, teniendo el imperio mas grande.

AQUELLA PRIMERA VEZDonde viven las historias. Descúbrelo ahora