26-Final

328 16 0
                                    

Llegó el día.

El día de despedirse de Barcelona.

Y de Pablo.

Ya teníamos todo listo.

Ví por última vez mi habitación.

Bajé con la maleta con toda mi ropa.

-¿Ya está todo?-asentí con la cabeza mirando al suelo.

Esperé a qué viniese Pablo.

Pero no llegó.

-Sara, sube al coche que no va a llegar.-dijo Eric y le hice caso.

Me abroché el cinturón.

Eric arrancó.

Tenía la maleta en la mano.

Llamé a Pablo pero no lo cogió.

-Sara, deberías dejar la maleta en el maletero, ¿no?-dijo Javi cuando hicimos una parada.

Bajé del coche y abrí el maletero.

Me encontré a Pablo.

-¡Sorpresa!-dijo abriendo los brazos.

Me tiré encima de él para abrazarle fuerte.

-¿Qué haces metido en el maletero?-dije con una sonrisa.

-Una sorpresa que te habíamos preparado.-dijo Eric detrás nuestra.

-Por eso te he dicho que dejes la maleta en el maletero.-habló Javi.

-¿O sea habéis hecho todo esto para que me pueda despedirme de él?-hablé con lágrimas.

Asintieron y yo me lancé a abrazarles fuerte.

Era la mejor sorpresa que me habían hecho, agradezco de tener estos hermanos, le doy gracias a Dios por darme a estos chicos como hermanos.

-Quería despedirme de ti antes de que te fueses.-dijo Pablo detrás de mí. Me separé de mis hermanos y me acerqué a él.

Le agarré de las mejillas y estampé sus labios con los míos.

Me cogió de la cintura fuerte.

-Bueno ya ya, es suficiente.-me apartó Javi.

-¿Y como vas a volver a Barcelona si nosotros nos vamos a la otra punta de Cataluña?-le pregunté a Pablo.

Señaló el coche de atrás.

-Mi hermana.-saludó su hermana desde el coche y yo le devolví el saludo.

-Bueno que te vaya bien mientras yo no esté.-tenía los ojos llenos de lágrimas y de tristeza. Sentí los pulsos de mi corazón acelerarse.

Me abracé a él muy fuerte y lloré mucho en su hombro mojando su sudadera.

-No te olvides de mí.-susurré en su oído.

-Nunca lo haré, angel.-besó mi cabeza y yo fui directa al coche. Sabiendo que no iba a volver a ver durante un tiempo que no sabría cuanto sería.

Me monté en el coche.

Miré hacia atrás viendo a Pablo en el otro coche sentado en el asiento de copiloto. Me vió y yo sonreí.

Me giré mirando para adelante sabiendo que no hay vuelta atrás.

El coche que tenía atrás cogiendo el camino hacia Barcelona mientras que el nuestro iba en dirección a las afueras de Barcelona.

Perdí de vista su coche.

Ya no iba a ver.

Hasta dentro de mucho tiempo.

Mi mirada se centró en la carretera.

_____________________________

Y se acabó esta historia.

Haré parte dos, no os preocupéis que la segunda parte será pronto,cuando se acaben las clases subiré el primer capítulo.

Será la continuación de esta.

Angel-Pablo Gavi Donde viven las historias. Descúbrelo ahora