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Narra Eric

Sara había salido y aún no había vuelto y nos estaba preocupando.

-Oye Javi. -rompí el silencio que había en el salón.

-Dime. - respondió

-¿Sabes dónde está Sara, es que la llamo y no me coge el teléfono?-pregunté preocupado.

-Pues no s...-dijo pero le interrumpió la puerta de casa, era Sara

Hablando de la reina de Roma.

Había vuelto.

Me levanté del sofá.

-Antes de que me eches la bronca, fui a casa de Pablo. -dijo.

-¿Para qué o qué?-pregunté cruzando brazos.

-Pues resulta que ha dejado a Ariadna, porque el otro día mientras vosotros estabais bailando por ahí, me la encontré besando a otro tío y le hice video, y he ido a casa de Pablo a enseñárselo-explicó.

Anda que bien.

Que se joda.

-¿Y que le has dicho?-escuché un suspiro por su parte y eso no era buena señal.

-Le he dicho que si quiere otra oportunidad, tiene que volver a conquistarme. - anunció.

Javi y yo nos miramos entre nosotros.

Sonó el timbre distrayendonos.

Sara abrió la puerta y era un señor de correos.

-¿Sara Ruiz?-preguntó.

-Si soy yo.-dijo y cogió el ramo de flores.

Cerró la puerta.

-¿De quién es?-preguntó Javi.

-De quién va a ser, del que estábamos hablando hace un minuto-dijo Sara

-Además hay una carta.-cogió la carta entre sus manos.

Y la empezó a leer.

Sara, soy Pablo, no se si leerás esta carta o la tires a la basura junto a las flores, pero bueno, que siento haberte puesto los cuernos con Ariadna, no sabía que me estaba haciendo lo mismo que te hice yo a ti, era tan ciego, no supe valorar tu amor, no cuidé tu corazón lo suficiente, te engañé y no fui responsable de mis actos, juro, que ella me pillo borracho antes de que viniesemos aquí, se corrieron los rumores de que yo estaba con Ariadna, estaba cagado por si los leías, y en el partido se me ocurrió hacer la "A", y me amenazó, que si no la hacía, iba a contártelo, pero me quitó el móvil, no pude escribirte ni nada, espero que con esta carta me perdones.

Att:Pablo

La terminó de leer, yo tenía las manos en la cara y Javi estaba con los ojos abiertos, y Sara,mejor no ver su cara.

La tenía hecha un cuadro.

Estaba al borde del llanto, pero la abracé antes de que pudiese llorar.

Pero no pudo más y lloró en mi sudadera mojandola.

-Tranquila, respira Sara por favor-la tranquilicé dándole golpes suaves en la espalda.

-Ahora vas a ir a casa de Pablo y a hacerle demostrar que ha hecho que con una carta, te ha vuelto loca. - cogímos las llaves del coche y salimos por la puerta.

Nos metimos en el coche directos a casa de Pablo.

Narra Sara

Con la carta que me había enviado Pablo, hizo que mi corazón saltase de alegría.

Salimos de casa directos a la de Pablo.

Aparcaron mis hermanos y yo bajé del coche.

Llamé al timbre y me abrió Pablo.

-Hola Sa...-le interrumpí con un beso, lanzadome a sus labios.

Me correspondió el beso, escuché los gritos de alegría de mis hermanos, sonreí entre el beso.

-Te has currado la carta.-me sépare de sus labios con una sonrisa. -

-Qué bonito ésto-escuché una voz conocida y me separé.

Me dí la vuelta y no lo podía creer.

La cara de mis hermanos era un cuadro y la de Pablo.

Su cara estaba sin entender nada.
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Perdón por dejaros con la intriga, mañana o esta tarde sabreis quién es

Angel-Pablo Gavi Donde viven las historias. Descúbrelo ahora