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Era Hugo.

Otra vez.

No iba a dejarme en paz hasta verme enterrada bajo tierra.

-Qué bonito esto.-esta voz otra vez no.

-Pensé que te había perdido de vista, pero no...Hasta que no me tire por un puente no desapareces, ¿verdad?-pregunté y él asintió.

Se acercó a mí.

Mis hermanos bajaron del coche alertados.

-¿No me echas de menos, princesa?-me acarició el pelo.

-No me toques y juro que...-se puso la mano en la boca pero se la mordí.

Se quejó y me agarró de la muñeca pero le hice una llave de judo y lo tumbé en el suelo y le metí un puñetazo haciéndole sangre en la cara.

-Sara ya, para-me agarró Javi de los brazos para separarme de Hugo.

Se acercaron mis hermanos hacia él

-La próxima que vuelvas a tocar a nuestra hermana, no amaneces vivo, chaval-le amenazó Eric.

-Y tranquilo, que si te acercas o la tocas un pelo, tiene a 3 personas cerca de ella y si la tocas o le haces algo, haremos tu vida imposible hasta que te tires por un puente, ¿esta claro?-le amenazó Pablo

-A lo mejor, puede que directamente ella te parta la boca como acaba de hacer, o lo hacemos nosotros, así que circula que no te queremos ver-le cogió Javi de los brazos y lo mandó lejos de nosotros.

Ahora podemos estar bien, sin nadie que nos interrumpa.

-Ahora estamos todo bien, por cierto Sara, ¿no tendrás otro ex al que partirle la boca?-habló Pablo

Me reí y negué con la cabeza.

-¿Quedáis sin mí? Que malos-escuchamos la voz de Nadia.

Me reí y la abracé fuerte.

-Ese niño, desde cuando es tu novio y yo no me he enterado ¿que clase de amiga eres tú?-dijo Nadia haciendo drama.

Soltamos una carcajada todos.

-Bueno,¿vosotros os iréis no? quiero pasar tiempo con mi novio-dijo haciéndome la diva.

-Perdón su majestad, no sabíamos que usted estaría ocupada con su rey-dijo Eric rindiendo pleitesia y soltamos una risa

Se fueron y me quedé en casa de Pablo.

Me cogió de la cintura y me atrajo hacia él.

-¿Que buscas pablito?-acaricié su nuca con mis dedos.

-¿Yo? Nada-puso un mechón detrás de la oreja.

Atacó mis labios, y yo agarré su nuca con fuerza.

Bajó sus labios por mi cuello.

-Tranquilo fiera, que aún no. - le separé y gruñó contra mí cuello.

-Quiero marcar territorio y saber que eres mía y que nadie se te acerque.-dijo mordiendo mi cuello.

Genial.

Se separó y me toqué cuello.

Me dejó un chupeton.

-Controlate-le golpeé el hombro.

Me fui hacia la puerta.

Sentí un agarron en el brazo me tiró hacia él.

-¿Entonces hemos vuelto?-preguntó cerca de mis labios.

-Quién sabe-le di un pico  y salí por la puerta.

Llamé a mis hermanos para que viniesen a recogerme y un rato después encontré a Eric en el coche.

-¿Y? No quiero ser tío tan pronto.-le pegué una colleja en la nuca.

-No ha pasado nada.-dije mientras me ponía el cinturón.

-Lo digo por esto. -señaló mi cuello y tenía el chupeton de Pablo.

-Ni una palabra a Javi.-asintió.

Arrancó el coche y un rato después llegamos a casa y entramos.

Vi por el salón y la cocina y no estaba.

-¿Donde está?-pregunté y levantó los hombros.

-Ni idea. - respondió.

-Bueno yo me voy a mi cuarto a echarme un sueño profundo hasta me de la gana despertarme. - subí a mi cuarto a cambiarme y caí muerta.

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Angel-Pablo Gavi Donde viven las historias. Descúbrelo ahora